Las quejas permanentes por los servicios deficientes
—A la universidad se reclama por el uso de sus recursos: baños sucios, instalaciones sin mantenimiento, edificios viejos. Con el incremento presupuestal, ¿qué solución debe aplicarse, quiénes son responsables? —Seamos autocríticos. En el Consejo de Rectores lo he abordado y lo digo públicamente: fui estudiante de esta universidad y en mi preparatoria nunca pude hacer del baño. Eran indignos los baños. Como rector tengo los recursos de estudiante y las indignaciones que sentía entonces. Por eso he sido un rector que he ido a las escuelas y tratar de resolver esos problemas de infraestructura básica que sí los hay.
Empiezo por la autocrítica: si un director no puede tener los baños limpios, no merece ser director. Punto. Lo que haya que hacer porque se necesita. En esa idea empecé a viajar a todas las instalaciones y también supe que la universidad creció muy rápido, sobre todo las preparatorias. Cuando llegué a la rectoría había preparatorias con un presupuesto de 80 mil pesos al año. ¿Cómo le exijo a un director que tenga los baños limpios si con 80 mil pesos difícilmente mantienes una casa? Una escuela, imposible. Supe que para exigirles las medidas del cuidado de un plantel yo necesitaba dar una respuesta presupuestal, y hoy no hay una sola preparatoria que tenga tan poco presupuesto; la más rezagada debe tener unos 650 mil pesos al año. Pero el 95% de las prepas hoy tienen más de un millón de pesos al año como presupuesto anual. A partir de que se les entrega este presupuesto, ahora sí les voy a exigir.