El Mundo

La cabra y la nación occitana

- RAÚL DEL POZO

Arranca lo que los independen­tistas llaman el segundo asedio judicial o represión del Estado, una causa general contra Cataluña. Así habló Zaratrusta. Los reyes de las argucias comparan a los jueces del Tribunal Supremo con aquellos caníbales con ropones negros que, según

Voltaire, quemaron a Calvino. Francisco de Quevedo tenía muy mala opinión de los magistrado­s y de los catalanes. A los primeros los coloca entre los bufones y juzga la revuelta de Barcelona más como rebelión que como motín, no por el interés («el güevo»), ni por las institucio­nes («el fuero»), sino por el odio a España y al rey.

Es asombroso que casi 300 años después se siga hablando de fueros y de huevos. Ayer mismo, diputados independen­tistas en las puertas del Tribunal Supremo hacían un llamamient­o a los demócratas para protestar por la «represión» que sufre Cataluña. Apoyaban a Mireia Boya, defensora de la nación occitana, ex presidenta del grupo parlamenta­rio de la CUP. Fue concejala de Lez, en el Valle de Arán, y reivindica parte del sur de Francia y algunos valles italianos. Los políticos profesiona­les analizaron la comparecen­cia de Mireia como un acto de venganza y humillació­n a Cataluña. La heroína de la CUP actuó con una gallardía que no se observa en los partidos burgueses. Declaró que si la encerraban saldría cuando se proclamara la república de Cataluña. Pero no la metieron para adentro, a pesar de que la occitana reconoció ante el juez Pablo Llarena que la declaració­n unilateral de independen­cia no fue simbólica, sino real.

Los independen­tistas buscan olas de solidarida­d. Necesitan como el pan de cada día mártires para echarlos a las fieras. Los universita­rios intentaron sin éxito adelantar su propio mayo gritando que disidencia no es rebelión. Mientras, sus partidos son una quijada de asno y llaman a las masas a romper los barrotes de la cárcel. Es lo que Antoni Puigverd llama socializar la desgracia. «Puigdemont y los suyos han acampado en el irredentis­mo. Cuando los imputados sean tantos que desborden las rejas, cuando los jueces y fiscales ya no den abasto a hacerse cargo de tantas imputacion­es, entonces la causa catalana romperá la pared europea de cristal».

Claro que, luego, hacen énfasis en la venganza de los jueces y políticos del Estado. Ese «resistenci­alismo sacrificia­l» necesita de la crueldad de los verdaderos villanos, los que tratan a los independen­tistas como a asesinos. Aún creen que el futuro está de su parte y necesitan «la Legión y la cabra», como dijo ayer Gabriel Rufián en el Congreso. Precisan, urgentemen­te, llenar las plazas, aquello que Edmund Burke denominaba «multitud, tiranía multiplica­da».

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico