Detenido otro mando policial implicado en la red de Villarejo
La Fiscalía interpreta como un intento de presión la grabación del comisario a Corinna
Anticorrupción le considera una pieza «importante» en la trama de Villarejo
Cae otro mando policial. Se trata del comisario Enrique García Castaño, detenido en el marco de la investigación que se sigue en la Audiencia Nacional por el caso Villarejo. En concreto, un ex alto mando que estuvo destinado en el más alto nivel de la Comisaría General de Información, conocido en círculos policiales con el apodo de El Gordo. García Castaño estuvo al frente de la UCAO (Unidad Central de Apoyo Operativo), órgano encargado de la logística de los seguimientos y los pinchazos policiales. El ex ministro Juan Ignacio Zoido le relevó del puesto.
La detención se practicó a instancias de la Fiscalía Anticorrupción. Los investigadores consideran a García Castaño una pieza «importante» en la supuesta organización criminal gestada por el comisario Jose Manuel Villarejo –ya jubilado y en prisión preventiva desde el pasado 5 de noviembre– para acceder a datos confidenciales de personas y elaborar informes. Los investigadores apodaron a García, El Big.
Fuentes conocedoras de la operación precisaron a este diario que García Castaño «intervenía activamente» en la elaboración de los «informes de inteligencia y dosieres personales», como los calificó el juez instructor del caso, Diego de Egea, ayudando, presuntamente, a Villarejo a obtener información tributaria y bancaria, además de facilitar escuchas telefónicas.
Anticorrupción lleva meses investigando a García Castaño y fue la que ordenó la detención de este comisario de Policía. Conviene recordar que el magistrado considera que los informes elaborados por los policías se utilizaron «en el ámbito de luchas personales» y fueron realizados con «información de carácter confidencial a la que accedía debido a su condición policial».
Dicho esto, la Fiscalía Anticorrupción sigue expurgando el material audiovisual intervenido a Villarejo en la operación policial en la que puso fin a la presunta trama criminal que dirigía. En este sentido, fuentes de la investigación entienden que la difusión de las supuestas conversaciones de Corinna zu SaynWittgenstein grabadas por Villarejo en 2015 son un «mensaje», un intento de poner ruedas en sus pesquisas.
Desde la Fiscalía no tienen muchas dudas de que la filtración de las grabaciones procede o bien del propio Villarejo o de su entorno, y que tratan también de acelerar una posible excarcelación del comisario. Fuentes del Ministerio Público consideran que se está presionando para evitar que las pesquisas contra el mando policial jubilado avancen. Es más, consideran que esta filtración no será la única y que es muy probable que sea la primera de una serie encaminada a tratar de torpedear la investigación que se sigue en la Audiencia Nacional.
El pasado noviembre, los fiscales, dirigidos por el juez De Egea, llevaron a cabo la operación Tándem, que acabó con la detención de Villarejo, entre otros, como presunto líder de una organización criminal. Durante la actuación, llevada a cabo por la Policía Nacional, los efectivos se incautaron de 40 terabytes de información que el comisario escondía.
Fuentes conocedoras de estos archivos aseguraron a este diario que Villarejo grababa a todo aquel con el que se reunía: personalidades del mundo judicial y político, e incluso a periodistas. Advirtieron de que hay grabaciones, incluso, del siglo pasado. En este sentido, los investigadores trillan los audios y únicamente mandan a los juzgados correspondientes aquellos que suponen una presunta actuación delictiva, «afecte a quien afecte», señalan.
Fruto de estas escuchas, los fiscales encargados del caso ya enviaron, con el visto bueno del juez instructor, dos grabaciones realizadas por Villarejo que dieron pie a dos actuaciones judiciales con detenidos. Como recuerdan estas fuentes, Villarejo ya denunció ante la Audiencia Nacional el contenido de estas conversaciones e, incluso, lo divulgó en un programa de televisión. Sus denuncias fueron archivadas por este tribunal.
Los diarios El Español y Ok diario desvelaron ayer unas supuestas conversaciones de Corinna en las que se atribuye a la consultora amiga de Juan Carlos I afirmaciones referentes a que el monarca la utilizó como testaferro para ocultar patrimonio en el extranjero, y que contaba con cuentas en Suiza a nombre de su primo. Estas informaciones también aseguraban que Corinna le dijo a Villarejo que se sintió amenazada, ella y sus hijos, por el director del CNI.
Fuentes de Defensa explicaron que existen «serias dudas» de que la voz que aparece en dichas grabaciones se corresponda a la de Corinna.