Tercera ola
Después del confinamiento más prolongado de la historia de la humanidad, y mientras que en México se afronta el reto de vacunar a 117 millones de mexicanos, las playas de l país han comenzado a ser abarrotadas por miles de turistas que desean dejar atrás el estrés producido por el distanciamiento social que trajo consigo la Covid19.
La gente ha llegado no sólo a los grandes destinos turísticos de México, ubicados en Quintana Roo, Baja California Sur, Guerrero, Colima, Oaxaca y Jalisco, sino también a cientos de balnearios y parques acuáticos situados a lo largo y ancho de territorio mexicano, en donde las autoridades aseguran que han reforzado la vigilancia sanitaria para proteger a paseantes y bañistas.
Pero debemos hablar también de las personas que, conscientes del peligro que representa aún la Covid19, han decidido permanecer en casa para no exponerse al mortal virus. Otros han tomado similar decisión debido a la situación económica, agravada durante la pandemia, que obligó a varios gobiernos estatales a imponer un confinamiento que dejó a muchas personas del país sin trabajo y sin ingresos.
Estas decisiones, y las acciones gubernamentales para restringir en algunos balnearios el flujo de visitantes hasta en un 25%, son importantes y dicen mucho del interés que gobierno y sociedad tienen para impedir que el número de contagios y muertos en el país crezca.
El cuidado debe continuar porque, a pesar de los esfuerzos de las autoridades de gobierno, aún falta mucho por hacer en materia de vacunación. Esta afirmación no intenta denigrar el quehacer de las autoridades del país, sino crear conciencia en la sociedad sobre la importancia de no dejar de observar las medidas de precaución sanitaria, como lo están haciendo muchas personas en las playas de México.
¿Cuál es el avance de la vacunación anticovid en México? Para responder a esta interrogante tomaré como base la siguiente información periodística, publicada el pasado 25 de marzo en Animal Político: “Desde diciembre pasado, se han aplicado 6 millones 243 mil 886 vacunas contra COVID, incluyendo 783 mil 790 esquemas completos (dos dosis)”.
Para tener una idea de cómo andamos en materia de vacunación, tomemos como ejemplo a la Ciudad de México, que transitó hace unas semanas de semáforo rojo a naranja. En esa ciudad capital, la más poblada del país, faltan por vacunar alrededor de 840 mil adultos mayores, informó el pasado sábado la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien nos dio la buena noticia de que todo el personal médico que atiende a pacientes con Covid19 en hospitales públicos y privados de la capital ya fue vacunado.
Está más que claro. La inmensa mayoría de los mexicanos no ha sido inmunizada todavía, de ahí la importancia de quedarse en casa en estas vacaciones, y si usted sale con el propósito de abatir el estrés que genera el encierro, hágalo respetando las medidas de sana distancia y buscando los lugares con menos afluencia de personas.
El problema es que esto último no está ocurriendo en los lugares de atracción turística, donde los vacacionistas pasean sin cubrebocas y sin respetar las medidas de sana distancia, pasando por alto lo que algunos expertos han señalado respecto a la tercera ola de contagios. Laurie Ann XiménezFyvie, actual coordinadora del Laboratorio de Genética Molecular de la Universidad Nacional Autónoma de México, dijo que la tercera ola de covid19 llegará a México pronto, en 2 o 3 semanas. Esto fue lo que explicó al respecto:
“Es como un tsunami, es solo cuestión de tiempo, esto lo dicen todos los indicadores que hay disponibles. El epicentro de la pandemia hoy está en Sudamérica, a lo largo de un año México ha tenido una tendencia muy parecida a estos países en especial a la de Brasil", señaló preocupada la científica de la UNAM.
En países como Alemania, el virólogo Lothar Wieler advirtió que “la tercera ola será peor que las dos primeras, y que la única opción de romperla es reducir los contactos al mínimo”.
Por ello, si usted sale a pasear estas vacaciones a playas o balnearios, cuídese mucho por favor, y no dé por hecho que la pandemia ya fue superada. No la hemos superado aún, y tardará algunos meses para que lo hagamos.