Renace el Congreso del Trabajo
En el mundo, la pandemia del COVID 19 ha perjudicado a millones de trabajadores y miles de patrones, pero para algunos pocos, ese grave problema sanitario resultó un redituable negocio. Por siempre la atención de la salud ha sido un gran negocio. Muchos p
La necesidad y urgencia de atender el problema provocó la elaboración acelerada de millones y millones de productos como medicamentos, equipo, uniformes, vestimentas, mobiliario hospitalario, artículos para aminorar el contagio de médicos, paramédicos y personal de salud y administrativos entre otros adminículos. La ciudadanía sigue adquiriendo diversos artículos preventivos para evitar o disminuir contagios y seguirá por un buen tiempo, aún con la vacunación. Obviamente las empresas y sus trabajadores dedicados a manufacturar este tipo de artículos anti pandemia vieron multiplicar sus oportunidades económicas.
La elemental fórmula de la economía queda demostrada: a gran demanda, gran oferta y ante la urgencia, los costos se han elevado. A nadie le queda duda. Un simple ejemplo: Los cubre bocas que quizá costaban dos o tres pesos, aumentaron hasta 20 tantos o más, al menos en el inicio de la covídica peste que en México ha cobrado más de 200 mil vidas.
En medio de esta vorágine laboral en México, los trabajadores y empleados han llevado la peor parte. Los mayores de sesenta años y máxime con afectaciones crónicas fueron enviados a “descansar” y a encerrarse en su casa para salvarse del contagio. De todas formas miles fallecieron.
Muchos de esos adultos mayores tuvieron que buscar sustento en otras fuentes como el empleo informal. Muchos por eso enfermaron y hasta fallecieron. Antes de esto, desde que los políticos en la administración pública fueron desplazados por los tecnócratas al tiempo de que la voracidad mundial obligó a que el Estado se despojara de su patrimonio, no cesaron los sindicalistas que avizoraban los cambios que luego se convirtió el golpe a los trabajadores. Jalisco a través de la FROC siempre mantuvo esa alerta llamando a la unidad como único camino, frase acuñada en la época moderna, por el extinto líder sindical Alberto Juárez Blancas, y que afortunadamente ahora se retoma en el gremio sindical y en el CT.
Recientemente en CDMX se llevaron a cabo diversos eventos tendientes a la renovación del Congreso del Trabajo (CT), lo cual quedó compaginado, con la celebración del 55 aniversario de ese organismo que es, o debiese ser, un crisol de defensa de los trabajadores y empleados. Nació formado por los diversos grupos sindicales del país. De ahí que resulta interesante que, por un lado se vea renacer con la simiente original, es decir, buscar la unidad nacional de los trabajadores y “retomar el papel protagónico que le corresponde al movimiento en su conjunto (de los trabajadores) para borrar la terrible desigualdad que ahoga la justicia y el derecho que tienen todos los trabajadores a vivir mejor”, según palabras del presidente del Congreso del Trabajo Reyes Soberanis Moreno durante la ceremonia de Toma de Protesta de la nueva directiva.
En esta nueva etapa del Congreso del Trabajo, el Consejo Nacional Laboral (CONLABOR) y la Federación Revolucionaria de Obreros y Campesinos del Estado de Jalisco (FROC CONLABOR), ocupan importantes lugares como es la presidencia de la Comisión de Asuntos Económicos y Sociales la cual, durante dos años, estará a cargo del Doctor, Maestro y Licenciado, Antonio Álvarez Esparza, director coordinador de CONLABOR y Secretario General de FROC Jalisco. Dicho Consejo está formado por más de una docena de Federaciones, Sindicatos, y Organizaciones Laborales estatales y nacionales de una docena de estados de la República.
Cabe recordar que según dijo Soberanis Moreno, en la ceremonia de Toma de Protesta, el CT “ha promovido la creación instituciones de como el Infonavit, Fonacot, para complementar la seguridad social y el bienestar de los trabajadores”. Ojalá la convocatoria del presidente del CT, a los integrantes del organismo para que “asumamos con la máxima responsabilidad de estos momentos críticos, el fortalecer la unidad para emprender acciones que pongan a los trabajadores en mejores condiciones de vida”, no quede desvirtuada por presiones, ofrecimientos e intereses políticos.
Habrá que esperar que se den a conocer los programas de trabajo de este renacido CT porque los trabajadores y empleados agrupados en el Congreso del Trabajo tienen enfrente una nueva LFT que burocratizará y judicializará más la relación laboral con el patrón, además de que está en el pandero legislativo el tema de las out sourcing y su regularización, sin olvidar las presiones del T MEC y los intereses del capital mundial Ojalá y no aparezca el demonio que ofrezca todo a cambio de la adoración, como le sucedió a Jesucristo, según la Escritura. Y…qué pasa?