Se quemó al saltarle un flamazo del bóiler

Muy tranquilo y contento se iba meter a sus cobijas para descansar, Marcos Aldama Montaño, de 27 años de edad y para no levantarse temprano a prender su bóiler prefirió encenderlo la noche del pasado viernes, pero con tan mala suerte de que estaba abierto el piloto y al encender el cerillo surgió el flamazo que le causó quemaduras en rostro, tórax, cuello y miembros superiores izquierdo y derecho, pues había acumulación de gas.

Familiares que se percataron de lo ocurrido de inmediato solicitaron el auxilio de los paramédicos de la Cruz Roja, quienes ocurrieron al domicilio de Marcos ubicado en una de las calles de la colonia Valentín Gómez Farías de esta capital, quienes tras prestarle los primeros auxilios lo trasladaron al Hospital General 450 donde quedó internado para recibir la debida atención médica, pues las quemaduras que presentan son de segundo y tercer grado.

De lo anterior conoció el agente del Ministerio Público en turno, adscrito a la Fiscalía General del Estado, quien se presentó al Hospital citado y declaró al lesionado y una vez que conoció que todo se trató de un lamentable accidente dio por terminada su actuación, ya que no hubo delito que perseguir en este caso.