A LA SOMBRA
Nos recuerdan que los mandatarios de al menos ocho entidades están entre la espada y la pared por el rebrote de casos de coronavirus, como le adelantó puntualmente El Sol de México, pues el aumento en la ocupación hospitalaria los obliga a volver al semáforo rojo, como pasará a partir de este viernes en Chihuahua, pero nadie quiere responsabilizarse de una nueva parálisis en las actividades productivas.
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En esos casos dicen que están Claudia
Sheinbaum y Miguel Barbosa, quienes han optado por llamar a las poblaciones de la Ciudad de México y el estado de Puebla a tomar conciencia y a extremar las medidas sanitarias, esto para no regresar a una cuarentena que los deje, además del color del semáforo, también en números rojos.
*** El exsecretario de Medio Ambiente,
Víctor Toledo, se tomó muy en serio aquello de que los que no estén con el Presidente están contra él, de ahí que, esta misma semana, el otrora funcionario de la 4T se lanzó a través de sus redes sociales contra el Tren Maya.
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“Semarnat: Nace una nueva demagogia ambiental”, escribió sobre un video que publicó la dependencia para informar sobre los pormenores del proyecto ferroviario. Eso sí, las palabras del doctor Toledo Manzur no harán eco en el Gobierno, pues dicen que el mismísimo Andrés Manuel López
Obrador ha expresado que los temas medioambientales lo tienen prácticamente sin cuidado.
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Cemex, que encabeza Fernando A.
González, reportará sus resultados del tercer trimestre de 2020 el miércoles 28 de octubre de 2020. Un aviso a los inversionistas en la BMV encendió alertas por lo pronto: “Debido a la falta de visibilidad y alta incertidumbre derivada de los efectos económicos negativos de la Pandemia del Covid-19 y considerando la consolidación de indicadores de deterioro en ciertos países, espera reconocer en sus estados financieros del tercer trimestre de 2020 un cargo no monetario por deterioro total de aproximadamente 1,500 millones de dólares que se compone de aproximadamente 1,020 millones de dólares de deterioro del crédito mercantil relacionado con el negocio de Cemex en Estados Unidos, así como aproximadamente 480 millones de dólares de deterioro proveniente de activos ociosos en varios países”.