Nayib Bukele camina al segundo mandato
Popular por la guerra contra las pandillas, pero criticado por la economía y la violación de DH
ELECCIÓN PRESIDENCIAL EN EL SALVADOR
POBREZA EN EL PAÍS
alcanza al 29% de la población, según la CEPAL, y muchos salvadoreños siguen emigrando a Estados Unidos en busca de trabajo
80% del voto mantiene el popular presidente salvadoreño, según las encuestas
SAN SALVADOR. El presidente Nayib Bukele se encamina a la reelección en los comicios de hoy en El Salvador con una abrumadora popularidad, pero acusado de abusos en su "guerra" antipandillas, autoritarismo y maniobras ilegales para mantenerse en el poder.
Este empresario y publicista de 42 años, de ascendencia palestina, tiene prácticamente asegurado otro mandato de cinco años: llega a las elecciones de 6.2 millones de votantes con un respaldo del 90 por ciento y sin rivales de peso.
Gracias a su controvertida ofensiva contra las pandillas, El Salvador redujo a mínimos históricos los asesinatos (2.4 por cada 100 mil habitantes, según cifras oficiales) tras haber sido uno de los países del mundo con mayor violencia criminal.
Las pandillas, a las que Bukele atribuye unas 120 mil muertes desde que acabó la guerra civil en 1992, controlaban barrios y ciudades enteras, aterrorizando a la población salvadoreña.
"Nuestra vida era difícil. Amenazaron con matar a mi mamá y a un hermano y mi empresa de autobuses tenía que pagar a las pandillas 560 dólares al mes de extorsión. Ahora hay tranquilidad", dijo una transportista que no quiso dar su nombre por temor a represalias.
Bajo un régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, policías y militares detuvieron a unas 75 mil personas.
Amante de los golpes de efecto, Bukele mostró a miles de pandilleros tatuados, en ropa interior, rapados y encadenados, en la moderna cárcel que inauguró hace un año con capacidad para más de 40 mil reos, la más grande de América Latina.
Organizaciones como Amnistía Internacional denuncian "arrestos arbitrarios", "torturas" y "muertes de presos". Unos siete mil fueron liberados tras ser hallados inocentes.
Tras romper en 2019 con tres décadas de bipartidismo al imponerse con un 53 por ciento de los votos, Bukele lleva ahora al país a un "sistema de partido hegemónico", opinó Álvaro Artiga, politólogo de la Universidad Centroamericana (UCA).
Señalado por sus críticos de autócrata, controla el Congreso, la justicia, la fiscalía y el resto de instituciones estatales.
Su camino a la reelección quedó abierto con un fallo de la Sala Constitucional renovada por el Congreso, que interpretó a su favor la Carta Magna que le prohibía volver a ser candidato a la presidencia.
En unos comicios que las encuestas dan por resueltos en primera vuelta (50 por ciento más un voto), salta la pregunta de lo que viene después.
"En su segundo mandato podría acabar la luna de miel. Después de la seguridad, vendrán las otras demandas: salario, educación, salud", dijo a Marta Lagos, directora de Latinobarómetro.
La pobreza alcanza al 29 por ciento de la población, según la CEPAL, y muchos salvadoreños siguen emigrando a Estados Unidos en busca de trabajo.
Más de tres millones de salvadoreños que viven en el exterior enviaron un récord de remesas de ocho mil 181 millones de dólares en 2023, dijo el Banco Central. Un oxígeno para la economía dolarizada.
Anunciado por Bukele con fuegos artificiales como dinamizador económico, el bitcóin pasó a ser en 2021 moneda de curso legal. Pero según un sondeo de la UCA el 88 por ciento de salvadoreños no lo usó en 2023.