A echar al poderoso
EL VOLANTE DEL ESTELÍ RECORDÓ EL COBRO A LO PANENKA ANTE UNO DE LOS MEJORES DEL CONTINENTE
Forjar la sorpresa en la Liga de Campeones de la Concacaf es el primer reto para Byron Bonilla. Pícaro como su cobro de penalti en la ida, el volante del Real Estelí sabe que echar de la competencia al que él mismo catalogó como “poderoso” campeón de México, sólo lo hace recordar a sus dos máximos orgullos, su familia y su país.
“Eliminarlos sería la alegría más grande de Nicaragua y el orgullo más grande para mis hijas”, sentenció Byron para ESTO.
El volante sabe en qué sitio está, por eso dejará todo en la cancha por el Tren del Norte. “Lo es todo, el mayor orgullo de Nicaragua, formar parte de esta institución me da orgullo, la verdad, no lo digo por estar, ellos me vienen buscando desde que yo era joven, desde que empecé mi carrera, debuté tarde, en 2016, vengo a hacer las cosas bien, vengo a un buen estudio y ser parte de la institución”.
Sabe que las Águilas saldrán a atacarlos desde el silbatazo inicial, pero eso no les da miedo. “Espero que se van a volcar adelante, tienen poco que perder y mucho qué ganar, si lo vemos de un punto de vista espejo, reflectivo, nosotros tampoco. Nosotros no le debemos tener miedo a nadie, sólo respeto, pero no nos echaremos atrás, si logramos tener el balón, tenemos la paciencia de tenerlo, puede ser un buen juego. Lo respeto, no sé quién va a jugar o a poner, pero para mí, somos 11 contra 11, lo demostramos y al final, el que tenga más actitud, más coraje, más ganas de ganar, pasará a la siguiente ronda”, sentenció.
Avanzar no sólo es un sueño, también significaría medirse a otro histórico como Guadalajara, aunque, puso freno de mano y aclaró que primero está el encuentro en el estadio Ciudad de los Deportes. “Lo hemos pensado, estamos ansiosos de que se pueda dar, si se nos da, Dios lo permite, nos veremos de nuevo, si no, será una linda experiencia para buscar otra el pró-ximo año”.
primera
El mayor orgullo es que soy Nica, es como lo que está haciendo el Estelí, le ganamos al América, ya todo mundo va a saber dónde perdió: fue en Nicaragua”
BYRON BONILLA VOLANTE REAL ESTELÍ
Eliminarlos (a los americanistas) sería la alegría más grande de Nicaragua y el orgullo más grande para mis hijas”
Nosotros no le debemos de tener miedo a nadie, sólo respeto, pero no nos echaremos atrás, puede ser un buen juego”
BYRON BONILLA VOLANTE REAL ESTELÍ
SU PAÍS, EN ALTO
Le prometió a la gente que, al final de la serie contra las Águilas, su país estará orgulloso por la forma en la que encararon el duelo. “Ellos son eso, son el corazón del equipo, pueden tener tranquilo el corazón, nosotros venimos a dar nuestro 100 por ciento, no sabemos qué va a pasar, pero vamos a demostrar que nos estamos dejando todo por Nicaragua, venimos a dar todo, si en nuestras manos está la clasificación, la llevaremos, pero si no, que sepan que Nicaragua queda muy en alto”.
TIRO A LO PANENKA
La Panenka no quedó atrás. Con emoción en los ojos, relató la forma en la que preparó el cobro. “Ya lo había decidido un día antes, lo platiqué con un portero de nosotros, de qué posibilidad había, me comentó y yo ya lo había decidido. Ya tenía tiempo que no lo hacía, desde un partido contra El Salvador que no lo practicaba, porque a veces los porteros no les gusta practicarlo, porque se enojan, nada, cuando tomé el balón, se lo comenté a un compañero que estaba cerca, me sonrió y supe que lo iba a hacer así, lo tiré como una opción segura, pensé que él se iba a tirar a cualquier lado, no sabía cuál, al final, me dejó el centro y lo tiré de buena manera, si lo hubiera tirado mal, le pudo haber dado tiempo de reaccionar, Gracias a Dios entró”, dijo y continuó “me considero como diferente, aunque no tuve escuela de futbol, aprendí mucho viendo a jugadores brasileños, Neymar, Robinho, me encantaba, entonces esa alegría que se da en la cancha, es lo que trato de hacer para mí mismo. Pensé que nos daría la ventaja y sucedió, no lo pensé como que aquí me hago grande, lo pensé como una ventaja, el equipo ocupaba un aire y qué mejor que hacerlo de la manera que lo hice, al final resultó”.
Ver a Luis Ángel Malagón no lo hizo dudar. “No, yo me cercioré con un compañero en la cancha, lo tenía en la mente, lo voy a tirar a lo Panenka, y me preocupé nada más por pegarle con una altura perfecta y creo que funcionó”, sentenció.