Joven recluída se refugia en la poesía
Ruth se encuentra desde hace 10 años en el Cereso, donde dedica su tiempo para estudiar y hacer deporte
Hace 10 años, cuando apenas tenía 24 años de edad, Ruth llegó al Centro de Reinserción Social I (Cereso), ante un delito que se cometió en grupo y derivado de una mala decisión. Según contó para El Sol de Durango, cuando era niña fue víctima de bullying, situación que la llevó a empoderarse y ser la fuerte del salón, y enseguida mostrarse valiente ante el mundo.
Este conflicto entre niños la llevó a que su personalidad se modificara, y enseguida, a sus 24 años de edad perdió su libertad luego que estuvo involucrada en un secuestro. Ruth reconoce su error, pero asegura que puede reinventarse, y es para lo cual trabaja al interior del Cereso. Dijo, puede “levantarse del polvo”.
En medio de esas ganas por renovarse al tiempo que paga por su error, la joven Ruth se encuentra avocada en aprender todo lo que pueda y también lo que le gusta, por lo que además de contar con una marca de joyería, de la cual vende a través de dinámicas que hacen las autoridades, o cuando son días de visita.
Nuestra entrevistada nos cuenta que también ha escrito una serie de poemas; ahí dentro descubrió que esto le gusta y se le da bastante bien, pues son pensamientos salidos del alma
Enseguida uno de sus poemas, y el cual fue compartido de manera directa para los lectores de El Sol de Durango.
Las respuestas del corazón Sueños tal vez inalcanzables Miedos realmente traumantes
Y tu presencia de amor inigualable. Una elección, un llamado,
Un amor transformado. Sueños, recompensas, anhelos, Bendición de miles de pactos
Un rayo de luz Proveniente de un silencio.
Un suspiro del alma,
Y un gran silencio de amor. Una promesa y varías respuestas Miles de preguntas y una sola respuesta. Mi llamado al señor
En medio de esas ganas por renovarse al tiempo que paga por su error, Ruth se encuentra avocada en aprender