¿Tiktok es el estúpido?
Independientemente de que la mayoría del contenido de Tiktok sea, precisamente, contenido basura, llama la atención que se culpe a la plataforma de su proliferación, como si se tratara de un fenómeno nunca antes visto. En realidad, la promoción del contenido basura no es nueva, prácticamente ha venido de la mano del crecimiento de las sociedades de comunicación de masas y estado presente en la radio y la televisión desde sus inicios.
En lo que respecta a las redes sociales, cualesquiera que estas sean, la mayor parte del contenido que se transmite no tiene una finalidad académica, artística o cultural. En principio, plataformas como Facebook tenían por objetivo compartir momentos de la vida cotidiana entre los usuarios, conectando los espacios privados y públicos de tal suerte que se transformaran las relaciones sociales. Poco a poco se fueron creando páginas con carácter comercial, aunque desde siempre se ofrecieron anuncios, y el contenido con fines de entretenimiento comenzó a incrementarse.
En el caso de Twitter, cuyos usuarios son los grandes promotores del boicot a Tiktok y que en su mayoría pertenecen a las generaciones de los nacidos antes de 1990, el contenido es diverso y está dividido en comunidades. Aprovechando el microblogging, los usuarios vierten sus opiniones en pocas palabras, acompañadas de memes y videos cortos y Twitter es un verdadero campo de batalla donde se puede medir el pulso político y las tendencias noticiosas. Pero tampoco se salva del contenido basura, es más, la mayoría de las opiniones carecen de argumentos y como hemos repetido aquí, proliferan el contenido violento y la pornografía.
Youtube se mantiene como la plataforma de contenido audiovisual más popular y permite tener acceso aceptando los cada vez más intrusivos anuncios. Pero desde sus orígenes el contenido basura inundó la red, incluso la plataforma comenzó a privilegiar el de ciertos creadores por su popularidad. El mundo de la música hoy día no se entiende sin Youtube, pues la industria reconoce que las vistas y reacciones de un video musical indican su éxito, algo similar ocurre con los avances de las películas.
Sin embargo, en cada una de esas plataformas es posible encontrar contenido valioso, creado por expertos en diversas áreas, hallar tutoriales, clases de idiomas, matemáticas o historia, opiniones de académicos, trabajo de artistas, divulgación científica y tecnológica. Recordemos que en televisión siempre existieron los canales culturales. No hay una sola plataforma donde no exista ese tipo de contenido, incluyendo Tiktok, donde cuentas especializadas en arte, astrofísica, botánica, genética, lingüística, entre muchas otras, cuentan con gran cantidad de seguidores.
Evidentemente, en ninguna de las plataformas ese es el contenido más popular, el negocio siempre ha sido promover contenido basura por su atractivo para las masas, Tiktok no es la excepción. En buena parte depende de que su algoritmo, siendo uno de los mejores, muestra a los usuarios videos simulares a los que ha detectado que son de su agrado. Es difícil que alguien que consuma contenido basura reciba recomendaciones científicas. Pero siempre se puede nadar contracorriente, le aseguramos que, si usted busca contenido de calidad, lo encontrará.
En cada una de las plataformas es posible encontrar contenido valioso, creado por expertos.