Lula promete unir a Brasil y regresar la paz
Lunes
31 de octubre de 2022
SAO PAULO. El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prometió unir a un país dividido y “restablecer la paz” tras derrotar por un estrecho margen al actual mandatario Jair Bolsonaro en la segunda vuelta presidencial.
“Estoy aquí para gobernar este país en una situación muy difícil, pero con la ayuda del pueblo vamos a encontrar una salida para que el país vuelva a vivir democráticamente”, afirmó el líder del Partido de los Trabajadores (PT) desde un hotel de la ciudad de Sao Paulo.
Con el 100 por ciento por ciento de las mesas escrutadas, Lula, que asumirá el poder el 1 de enero de 2023, ganó las presidenciales con 50.90 por ciento de los votos, frente a 49.10 por ciento que obtuvo el líder ultraderechista.
Es el margen más estrecho entre dos candidatos presidenciales en segunda vuelta desde la vuelta a la democracia en el país, y es la primera vez que un presidente no logra ser reelecto, de acuerdo con medios brasileños.
El izquierdista también se convirtió en el primer político del país en ser reelecto para un tercer mandato presidencial.
La diferencia entre ambos candidatos es de dos millones de votos a favor de Lula, de un total de 156 millones de electores.
“A partir de enero de 2023, voy a gobernar” para 213 millones de brasileños; “no existen dos Brasiles, somos un único país, un único pueblo, una gran nación”, señaló el dirigente progresista, en compañía de sus principales aliados y su esposa, la socióloga Rosângela Silva.
Lula manifestó, en un discurso leído, que “es la hora de reunir las familias y rehacer los lazos de amistad rotos por la propagación criminal del odio”.
“A nadie le interesa vivir en un estado permanente de guerra. Este pueblo está cansado de ver al otro como enemigo. Es hora de bajar a las armas. Armas matan y nosotros escogemos la vida”, manifestó.
En sus primeras palabras, también prometió “fortalecer” la lucha contra la violencia machista y “enfrentar sin tregua el racismo y la discriminación” para que “blancos, negros e indígenas tengan los mismos derechos”.
“El desafío es inmenso, es necesario reconstruir este país en todas sus dimensiones. Necesitamos reconstruir el alma del país, el respeto a las diferencias y el amor al prójimo”, afirmó en un pronunciamiento que buscó tender la mano a todos en un país polarizado.
Lula tendrá como vicepresidente a un antiguo adversario, el exgobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, un liberal de perfil conservador.
Lula también se dirigió a la comunidad internacional: “Brasil está de vuelta” y dejará de ser un “paria”, prometió. Y aseguró que combatirá la deforestación porque el planeta necesita una “Amazonía viva”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, felicitó a Lula por su victoria en las elecciones, que han sido, dijo, “libres, justas y fiables”.
“Envío mis felicitaciones a Luis Inácio Lula da Silva en su elección para ser el próximo presidente de Brasil en estas elecciones libres, justas y fiables. Espero que trabajemos juntos para continuar la cooperación de los dos países en los próximos meses y años”, dijo Biden en un mensaje difundido por la Casa Blanca.
Con este comunicado emitido poco después de conocerse la victoria de Lula, Estados Unidos ha querido legitimar el resultado por un estrecho margen.
La Unión Europea también se apresuró a resaltar el triunfo de Lula.
Por su parte, varios presidentes latinoamericanos, desde Chile, Colombia, Venezuela, Uruguay y Honduras, felicitaron al izquierdista.
“Ganó Lula, bendito pueblo de Brasil. Habrá igualdad y humanismo”, escribió en un tuit el presidente de México, Andrrés Manuel López Obrador.
“¡Felicitaciones @Lulaoficial !Tu victoria abre un nuevo tiempo para la historia de América Latina. Un tiempo de esperanza y
Lula aseguró hambre que su prioridad será nuevamente acabar con el
Simpatizantes del
Los bolsonaristas
Partido de los Trabajadores celebraron en Río se reunieron en la plaza central de Brasilia
de futuro que empieza hoy mismo”, escribió por su parte el mandatario de Argentina, Alberto Fernández.
El estallido de júbilo en la avenida Paulista de Sao Paulo, donde se reunieron miles de votantes de Lula, fue inmediato.
“Brasil vuelve a los carriles tras cuatro años de oscuridad, la población estaba sintiendo miedo y pasando muchos problemas”, dijo Larissa Meneses, de 34 años.
PRESIDENTE ELECTO “Es necesario reconstruir este país en todas sus dimensiones... econstruir el alma del país, el respeto a las diferencias y el amor al prójimo”