Periodismo: la espiral del terror
En 2017, 65 periodistas fueron asesinados en el mundo. En México se registraron 12 casos, misma cifra que en Siria. Esto convierte a México en el país, que no está en guerra, más peligroso para quienes ejercen esta profesión.
Siria, en los últimos seis años, ha sido la nación más mortífera para los periodistas. La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) destacó que en México la presencia de los cárteles del narcotráfico y la corrupción de los políticos son temas que abordan los periodistas y los hacen blanco de amenazas, agresiones o asesinatos, como ocurrió con Javier Valdez Cárdenas en Culiacán, Sinaloa, en mayo de 2017. La organización reportó la muerte de 10 mujeres periodistas, el doble de 2016, entre ellas la mexicana Miroslava Breach, quien fue asesinada en marzo de 2017 en la capital de Chihuahua.
Los ataques contra periodistas aumentaron considerablemente tras el inicio de la guerra contra el narcotráfico en México en el año 2006. Algunos periodistas de México han dejado de cubrir la guerra contra las drogas por completo después de que sus compañeros han sido amenazados, secuestrados o asesinados. Otros periodistas se limitan a reportar a partir de los comunicados de prensa del gobierno.
De 2000 a la fecha, Artículo 19 ha documentado 156 asesinatos de periodistas en México, en posible relación con su labor. Del total, 144 son hombres y 12 son mujeres.
De estos, 47 se registraron durante el mandato anterior del presidente Enrique Peña Nieto y 36 en el actual de Andrés Manuel López Obrador.
El experto en terrorismo Pedro Carrasco Jiménez, español, doctor en Derecho, licenciado en Criminología, y Diplomado en Investigación Operativa y Sistemas, dice que el término terrorismo, derivado de terror también designa un método de acción política destinado a sembrar el miedo en un grupo social, racial o religioso, en una comunidad o ciudad y en algunos casos a desestabilizar al Estado.
Por su parte, Fernando Reinares, catedrático de Ciencia Política de la Universidad de Burgos y quien es autor de numerosas publicaciones sobre temas de su especialidad, aparecidas en cinco idiomas, y entre las que se encuentran Terrorismo y Antiterrorismo, Sociedades en Guerra Civil y Patriotas de la Muerte, establece que el terrorismo se practica con la deliberada intención de afectar la estructura y distribución del poder en regiones enteras, a escala misma de la sociedad.
En este caso específico, es en la escala de los comunicadores. Con todo lo anterior no quiero decir que las vidas de más periodistas secuestrados estén en peligro, y no lo digo. Pero sí lo pienso.