BITÁCORA EDUCATIVA
EPROFR. SANTIAGO ARELLANO GONZÁLEZ
Existe poco interés de concluir el proyecto de Reforma Educativa que proporcione
Educación de calidad en México.
Los proyectos personales y partidistas superan en mucho el interés superior de la Nación.
l presente año civil 2018, será el último en que el Gobierno Federal a través de la Secretaría de Educación Pública, pueda hacer realidad la llamada Reforma Educativa derivada de la serie de propuestas que el actual Presidente de la República Enrique Peña Nieto, impulsó desde su campaña para ocupar el más alto cargo al que todo político aspira en nuestro país.
Sin embargo, las voces de la oposición, de los educadores, de académicos, especialistas, sociólogos y demás implicados en el desarrollo social, afirman, como nosotros los maestros en servicio lo hacemos, la mencionada Reforma, ha tenido sus efectos más en lo laboral que en lo sustantivo: la educación de calidad que tanto han pregonado desde las más altas cúpulas del gobierno, va directo al fracaso como plan de gobierno.
Ha sido estéril la Reforma al Artículo Tercero Constitucional; nuestros gobernantes, siguen haciendo las cosas de igual manera o peor. El burocratismo se enseñorea en el sistema de asignación de plazas vacantes de cualquier nivel en educación básica (preescolar, primaria y secundaria), media superior y superior; sin maestros no hay escuela, aunque se cuente con infraestructura educativa, los alumnos y los padres de familia que han sufrido y sufren la carencia de sus maestros lo saben, pero… lamentablemente los callan, para aparentar que todo está bien.
En otros casos, y no son pocos, hay alumnos y maestros, pero la infraestructura educativa es inexistente. No hay salones de clase, se improvisan con láminas de cartón, con peligrosas estructuras de madera, los alumnos están hacinados, amontonados, sin las condiciones mínimas de normalidad para recibir sus clases. Además de espacio, les hace falta iluminación y ventilación. Si acaso les acondicionan aulas móviles en donde caben 25 o 30 alumnos, igualmente amontonados. Y ¿así quieren educación de calidad? Esto ocurre en todos los estados de nuestro México. Por cierto, que las “trailas”, aulas móviles, terminan completamente destruidas al finalizar cada ciclo escolar, como consecuencia de ese encierro y hacinamiento a que se somete a los estudiantes.
Tristemente, sabemos que en estados como Chiapas, Oaxaca, Guerrero y otros más, los niños siguen recibiendo sus clases sentados en tablas acondicionadas como butacas, bajo techos de palapa o varas, con un vetusto pizarrón y el piso de su aula es de tierra, sus sanitarios están al aire libre o si bien les va, son insalubres letrinas. Los profesores de esos lugares, mal llamados escuelas, se cambian constantemente o renuncian al no existir las condiciones para poder laborar normalmente.
Una cosa es el discurso político sobre educación, maquillado y con cuentas alegres y otra querer y poder hacer las cosas; desde los tiempos del ex Secretario de Educación Emilio Chuayffet Chemor, quien ocupó tan importante cargo, se veía venir una catástrofe en el sistema; su enfoque fue dirigido a la evaluación del Sistema, pero más bien, direccionado hacia los docentes en servicio, la cuestión era, es y seguirá siendo, golpear a las escuelas normales, verdaderas formadoras de docentes- muchas ya las han desaparecido- y como ejemplo del golpeteo artero e inmisericorde recordemos el caso Ayotzinapa, se llega hasta el caso de privar de la vida a jóvenes prospectos, aspirantes a convertirse en profesores de los pueblos indígenas, que es de donde la mayoría de los de la Normal de Ayotzinapa provienen.
Así pues, Chuayffet, se retiró, o lo retiraron de la Secretaría de Educación Pública, con la Reforma Educativa apenas encaminada para evaluar a los docentes en servicio; lo cierto es, que la organización sindical fue rebasada desde la detención y encarcelamiento de la maestra Elba Esther en febrero de 2013, y no tomada en cuenta ni siquiera, para simular en las decisiones del sector educativo. Si acaso hubo resistencia de quien fue sucesor de la maestra, fue tan débil que la parte patronal ha venido tomando decisiones de manera unilateral. La Secretaría de Gobernación tomó el control de la situación y Chuayffet ya no intervino, empezando su caída, pues mientras Osorio “negociaba” con el SNTE, Luis Miranda lo hacía con la CNTE. La caída política de Emilio Chuayffet, desarticuló la implementación de la Reforma Educativa.
A raíz de la precandidatura a la presidencia de la República del abanderado priista, deja el cargo de Secretario de Educación Pública quien fuera su segundo titular del sexenio, Aurelio Nuño Mayer, para ir a coordinar la campaña de José Antonio Meade, dejando nuevamente la Reforma Educativa inconclusa; esto a pesar de haberse anunciado que el proceso de elaboración de Planes y Programas de Estudio, estaban trabajándose para que el ciclo escolar 20182019, se pudieran implementar al cien por ciento en nuestro país. Debo mencionar, que actualmente se encuentra en etapa de prueba mediante un pilotaje de aproximadamente 80 escuelas de educación básica en nuestro estado; de la misma manera se está llevando a cabo en otras entidades de nuestro país.
Esto nos deja ver que la multicitada Reforma Educativa es postergada y relegada, los hechos hablan por sí mismos. Los ex secretarios de la SEP han demostrado no tener interés en sacar adelante este proyecto de educación de calidad para todos los mexicanos. Los proyectos personales y de partido superan en mucho el interés por la Nación. O ¿será acaso que una vez lograda la reforma laboral en el ámbito educativo lo demás no les importa? El Secretario de Gobernación, al parecer, también ya le corrió para buscar ahora una Senaduría por su estado: Hidalgo.