Marcan territorio en Badiraguato, Sinaloa
Grupo armado incendia casas y vehículos en un poblado; buscaba a dos presuntos integrantes de una organización rival
BADIRAGUATO, Sin.- Momentos de pánico vivieron habitantes de la comunidad de La Majada de Arriba, municipio de Badiraguato, luego de que hombres armados tomaron por asalto dicha comunidad e incendiaron inmuebles y vehículos estacionados.
Trascendió que el grupo de delincuentes al parecer enviaba un mensaje al cártel que actualmente comanda Rafael Caro Quintero, debido a la pugna que existe entre los hijos del célebre Joaquín el Chapo Guzmán Loera por la actual guerra contra su hermano, identificado como el Guano Guzmán.
Testigos señalaron que los atacantes buscaban a dos personas identificadas como El Sheriff y El Toro, para lo cual quemaron los hogares donde supuestamente se escondían.
De acuerdo con informes extraoficiales, alrededor de las 6 de la mañana de ayer varios sujetos armados con rifles de alto poder tomaron por sorpresa el poblado de La Majada de Arriba. Los hombres llegaron en un convoy de al menos cuatro unidades, que ubicó domicilios en especí- fico, sacó a los habitantes y comenzó a prender fuego a los inmuebles.
Una vez sitiada la comunidad, los gatilleros no dejaron salir de sus casas a los moradores, amenazándolos con matarlos si “asomaban las narices”.
Al lugar acudieron elementos de la policía municipal y estatal, reforzados por personal del Ejército Mexicano, quienes arribaron dos horas después del incidente.
El secretario de Seguridad Pública del municipio, Omar Vicente García, descartó personas fallecidas, heridas o privadas de su libertad y señaló que los delincuentes mantuvieron en zozobra a la población por más de una hora.
Según fuerzas de seguridad, tres casas y ocho vehículos fueron quemados por el comando. Personal de Protección Civil de Badiraguato, con apoyo del cuerpo de Bomberos de Mocorito, lograron sofocar los incendios después de hasta dos horas de trabajo.
La escuela y el centro de salud del poblado permanecieron cerrados y las calles se mantuvieron desiertas, salvo por algunos vecinos que debían realizar algunas actividades con ganado.
Autoridades policiacas y militares se mantuvieron en el poblado a la espera de los peritos de la Fiscalía General del Estado para el levantamiento de indicios.
Elementos del Ejército mexicano no realizaron acciones de patrullaje de la zona con la finalidad de dar con el paradero del grupo armado responsable del ataque; sin embargo, no hubo pistas de los delincuentes.