“No queremos abusos, no queremos discriminaciones y no queremos violencia”
CHIHUAHUA, Chih., (OEM) .- “No queremos abusos, no queremos discriminaciones, no queremos violencia, eduquémonos pues para que la vida resplandezca. Interpretar el aborto como un derecho humano de la mujer, es una mentira mayúscula, los derechos humanos no pueden servir para asesinar a nadie, la persona tiene derecho a su defensa y a ser defendida”, expresó el vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, Pbro. Gustavo Sánchez Prieto sobre la Fiesta de la Vida, que se celebrará el próximo sábado 20 de octubre.
“Interpretar el aborto como un derecho, es aberrante, es absurdo, tenemos que defender la vida, que es el primer derecho y más elemental, el derecho a vivir”, añadió.
En ese sentido, el padre Sánchez Prieto destacó que la Iglesia ama, defiende y promueve la vida, y por eso manifiesta el empeño en ese tipo de iniciativas que van justamente a favor de la vida, como la Ola Celeste y la Fiesta de la Vida, “la vida es un don precioso del que sólo Dios es autor, y no nos toca a nosotros disponer de ella”.
Señaló que cuando se argumenta que la mujer tiene derecho sobre su propio cuerpo, no es válida la afirmación en circunstancias ordinarias, ya que para una intervención quirúrgica se necesita un motivo justificado. De igual manera, dijo que argumentar que las mujeres embarazadas con intención de aborto tienen derecho sobre su propio cuerpo, como si sólo dependiera de su voluntad, sin considerar el entorno social y más cuando se trata de una vida que está anidada en su vientre, es erróneo, pues se debe privilegiar la dignidad del derecho de la persona que es completamente diferente a la mamá, aunque para la vida dependa de ella.
“A lo largo de nuestra vida, en diferentes momentos, dependemos unos de otros, y eso no nos autoriza a disponer de los que dependen de mí, y así se trate de una persona mayor, o de un enfermo incurable, de una enfermedad crónica. Hay que interpretar más la vida como servicio que como dependencia y en ese sentido, tenemos que celebrar el don precioso de la vida: la maternidad, la femineidad, la familia humana, el matrimonio, la patria, todos salimos ganando cuando realmente nos manifestamos a favor de la vida, y defendemos la vida en sus distintas etapas”, finalizó.