La parte grata del transitar cotidiano
Como comunidad, día a día, tenemos que lidiar con las repercusiones y efectos que nos impuso la pandemia del Covid-19; ante ello, gobiernos y habitantes debemos colaborar de manera conjunta, para mitigar sus efectos negativos que, han afectado significativamente a México, por la elevada pérdida de vidas humanas, datos oficiales señalan que, a la fecha asciende a más de 210 mil.
Ante este escenario, en este transitar cotidiano de manera grata, me encontré con dos grandes amigos Pablo Romero Morales y Álvaro Delgadillo Carrillo que conocí hace dos lustros, los cuales haciendo acopio de su formación profesional y ética atendían a diversos habitantes de la zona sur poniente del Municipio de Puebla.
Esperé que concluyeran sus gestiones, charlamos sobre las acciones que realizaban en ese espacio territorial, señalándome que obedecía a que las vienen efectuando desde hace un par de años, en apoyo a personas de escasos recursos, donándoles instrumentos y prótesis a habitantes con necesidades especiales, así como a las de escasos recursos, al tiempo de convivir y llevar regalos y espectáculo a los infantes.
Ambos amigos; Pablo es Comisionado Estatal y Álvaro es Embajador Plenipotenciario de la COMISIÓN IBEROAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS, para el desarrollo de las Américas (CIDHPDA), su principal objetivo es velar por las garantías de los ciudadanos y dar seguimiento a los casos denunciados ante diversas instancias de carácter públicas y privadas. Son ciudadanos con autoridad y calidad moral, reconocido prestigio y conocimiento en materia de Derechos Humanos.
En esta amena charla me comentaron que debido a las acciones y gestiones que vienen desarrollando en la (CIDHPDA), directamente en el sur del Municipio de Puebla, han tenido el acercamiento con entes políticos, así como el ofrecimiento de una candidatura; de manera formal los dirigentes del partido Compromiso por Puebla les piden participar como candidatos a una diputación local, situación que han valorado y seguramente serán los abanderados en el distrito 20 local.
De cara a la elección del próximo 6 de junio hoy más que nunca es importante conocer la trayectoria, antecedentes, conocimiento y compromiso de quienes aspiran a representarnos, virtudes que tendrán un peso específico para ganar una elección, independientemente de la ideología o del partido que los postule.
Los temas prioritarios por resolver en los 3 niveles de gobierno y por legisladores, es la inseguridad y la pobreza, los cuáles entre otros, deben incluir en su agenda los candidatos; para que los ciudadanos debamos conocer a detalle cual sería su efecto inmediato y como repercutirá en el desarrollo social.
Al respecto, el Municipio de Puebla enfrenta el problema de la pobreza urbana, su crecimiento generado por el fenómeno migratorio campo-ciudad, ha hecho que, sus habitantes continúen sobreviviendo con bajos ingresos.
Problema que es notorio en el sur del Municipio de Puebla y precisamente en el distrito local 20, que incluyen las juntas auxiliares de San Francisco Totimihuacán, San Pedro Zacachimalpa, Santa María Guadalupe Tecola, Santo Tomas Chautla, San Andrés Azumiatla y San Baltazar Tetela.
En la mayoría de las Juntas Auxiliares, es notoria la pobreza, la cual es fundamentalmente de tipo estructural, debido a las carencias y limitaciones con las cuales se desenvuelven sus habitantes, o las realizan en condiciones precarias o de exclusión y discriminación; ello, reduce las oportunidades de desarrollo y bienestar, a un alto porcentaje de su población.
El 6 de junio se nos presenta la oportunidad de decidir y votar por quienes queremos que nos representen; al respecto la trayectoria y el perfil de Pablo Romero y Álvaro Delgadillo en caso de ser candidatos y si el voto les favorece por el distrito local 20, tenga la certeza estimado lector que su desempeño será destacado en el Congreso Local.
En este difícil entorno, en todo el territorio nacional llegamos al desarrollo de las campañas políticas; por el bien de todos, esperamos que los candidatos estén a la altura de la nueva realidad y que los instrumentos que utilicen en la comunicación, alienten la participación ciudadana en la emisión de su sufragio, respeten las normas constitucionales y, planteen propuestas viables, sustentables y realizables.