20 DE ABRIL, DÍA INTERNACIONAL DEL CANNABIS
A pesar de ofrecer una gran cantidad de beneficios terapéuticos aún no se ha legalizado su uso medicinal INFORMACIÓN
Está comprobado que el uso habitual de la marihuana, al menos en personas menores de 21 años, puede empeorar depresiones y desembocar en desórdenes mentales más serios como la esquizofrenia, la ansiedad o el suicidio, esto de acuerdo con un informe emitido por la Casa Blanca, por medio de la Oficina Nacional de Control de Drogas (White House Office of National Drug Control Policy) de Estados Unidos, donde también se recalca que los adolescentes que sufren depresión son mayormente vulnerables hacia la dependencia de esta sustancia.
A este respecto Georgina Morlett Pérez, quien está por terminar de cursar la carrera de horticultura ambiental en la Universidad de Querétaro, estudia plantas medicinales y durante cinco años ha realizado investigaciones acerca del cannabis en su uso medicinal, recalca que no se debe consumir de manera continua si tienes menos de 21 años, porque
EDITORA: tu hipotálamo aún no ha sido formado por completo, no está maduro y si la consumes puede pasar que “te vuelvas loco por la marihuana”, como se dice coloquialmente.
DE LA PROHIBICIÓN AL USO MEDICINAL
Tiene relativamente poco tiempo que comenzó a ser polémico el tema de la marihuana, dice Georgina, pues afirma que a principios del siglo pasado era una planta normal, como la manzanilla, la prodigiosa o cualquier hierba medicinal; los migrantes que iban a trabajar a Estados Unidos se la llevaban y la consumían allá, muchos de ellos trabajaban y convivían con personas de color, a quienes les gustó también su efecto psicoactivo y la comenzaron a llevar a centros artísticos y culturales.
De ahí la conocieron también los rockeros bancos, luego la adoptaron los hippies en los años 60 y fue en esa década cuando la derecha estadounidense la satanizó al decir que provocaba que las personas se volvieran flojas, que no quisieran hacer nada, puro "amor, paz y sexo", entonces la hicieron ilegal a partir de entonces, narra la entrevistada.
Agrega que es desde finales de los años 80 cuando se empiezan a hacer investigaciones, porque se dieron cuenta de que también tenía otros usos, no solo la parte lúdica, sino que también tenía algunos beneficios para la salud. En esas fechas se descubre que en el cerebro tenemos un sistema (como el respiratorio o digestivo) que regula el apetito, la memoria, el sueño y lo llamaron endocannabinoide, porque tiene receptores neuronales con la misma estructura molecular que la planta del cannabis. Este tema apenas tiene 15 años en investigación.
Para explicarlo de forma sencilla, es como un lego que se conecta con otro lego, y esta planta tiene unas moléculas llamadas metabolitos secundarios, que encajan perfectamente con este sistema de neuronas. Por poner un ejemplo, si el cerebro