MILES INUNDAN LAS CALLES
Diversos contingentes tomaron el centro de la ciudad para visibilizar el feminismo en el Día Internacional de la Mujer
Las mujeres poblanas desbordaron las principales calles de la capital poblana para exigir justicia por las desapariciones, los feminicidios, los abusos de los hombres, así como de las autoridades y por todos los tipos de violencia que se han registrado en el estado de Puebla. Con pañoletas verdes a favor de la despenalización del aborto, playeras moradas para visibilizar la lucha feminista, entre gritos, así como batucadas fue como miles de mujeres marcharon este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Esta mega marcha superó las anteriores movilizaciones a favor de los derechos de las mujeres y se convirtió en una de las más importantes protestas para exigir un alto a la violencia de género, así como justicia para las víctimas. De acuerdo con las autoridades, fueron 11 mil almas las que se reunieron en los diferentes contingentes para alzar la voz, pero las organizadoras de las movilizaciones aseguraron que entre todos los contingentes sumaron más de 50 mil.
La jornada comenzó desde muy temprano con el Colectivo Voz de los Desaparecidos, cuyas integrantes pidieron apoyo de las autoridades para encontrar a sus seres queridos. Indicaron que la mayoría de las personas que buscan son mujeres y que las víctimas también son del género femenino.
Posteriormente, las feministas radicales convocaron a una “marcha separatista” que buscó el aborto legal, una vida libre de violencia, pero que hizo hincapié en el patriarcado y la marginación histórica que han vivido las mujeres poblanas. Siguieron los contingentes de organizaciones como 33 Mujeres, la colectiva Cam Cai de madres víctimas de violencia vicaria, APPS de diversidad sexual, mujeres presas y el Grupo Transgénero.
Desde que se tiene registro y hasta enero de este año, en Puebla se han contabilizado 244 feminicidios, 80 afectadas por trata de personas (principalmente niñas), 32 mil 967 víctimas de violencia familiar y 11 procesadas por haber abortado. Si para las autoridades no son razones suficientes para salir a marchar, si lo fueron para miles de mujeres que llenaron las calles de glitter morado y llevaron con ellas una consiga: “dejen de matarnos, dejen de violentarnos”.
Todas estas cifras causaron indignación, hartazgo social, enojo y motivaron a alzar la voz este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Un día que se conmemora la lucha de género, pero a su vez, una fecha que sirve para evidenciar que en pleno 2023 muchas mujeres, adolescentes y niñas siguen viviendo violencia física, patrimonial, sexual o hasta mental.
Es por ello, que las feministas radicales convocaron a su “marcha separatista”, una actividad que al igual que las otras movilizaciones quieren el aborto legal, una vida libre de violencia, pero que hizo hincapié en el patriarcado y la marginación histórica que han vivido las mujeres.
En este ejercicio, no se permitió el ingreso de ningún hombre y de ningún partido político, el argumento fue que no pueden ser cómplices del sistema que violenta, desaparece y asesina mujeres. “Todos los partidos son patriarcales, ninguna institución gubernamental nos representa”, exclamaron.
La cita fue a medio día en la Fiscalía General del Estado (FGE), institución que se ha negado a investigar todos las muertes violentas de mujeres como feminicidio, y que las ha clasificado como homicidio, haciendo que los victimarios tengan una condena más corta. Dicha institución -de acuerdo con las feministas y víctimas-, las ha revictimizado/cerrado las puertas en cientos de ocasiones.
COMIENZA MOVILIZACIÓN CON “MERCADITA FEMINISTA”
Todo comenzó con una “mercadita feminista” a las afueras de la FGE. En donde las mujeres pudieron vender diversos productos relacionados con el 8M, pero también hubo comida, ropa, “pinta caritas”. Se realizó un trueque, tendedero de denuncias en donde exhibieron hombres acosadores y volanteo con información de reproducción sexual.
Fue un espacio seguro, de mucha sororidad y en dónde se pudo escuchar constantemente el “¿podemos ser amigas?”, “hay que ayudarnos para empoderarnos”. Desde las 12 hasta las 14 horas se llevó a cabo este ejercicio. Aprovecharon para maquillarse, hacer sus carteles, crear nuevas amistades y hasta hubo lectura de tarot.
“Si te acosan en la calle, prende un porro así si viene la policía”; “las niñas no se tocan”; “somos la voz de las que mataron”; “Quiero vivir, no sobrevivir”; “Cansada de avisar que ya llegué viva”; “te prefiero muerta que violada y muerta”; “ni calladitas, ni bonitas”; “abuelita vine a gritar lo que a ti te hicieron callar”. Fueron algunas de las consignas.
El llamado “bloque negro” avisó a las presentes que no se permitiría el acceso “a vatos” (hombres) y recordaron que ellas “acuerpan-protegen” a los contingentes de cualquier suceso que pueda vulnerar la integridad de las mujeres. Se les pudo distinguir porque fueron vestidas de negro y llevaron pasamontañas del mismo color.
No obstante, como fue avanzando la
caminata, algunas chicas llevaron a su pareja o hubo hombres que se autoidentificaron como aliados y marcharon junto a las mujeres. Todo este tiempo, la Fiscalía estuvo resguardada por policías del sexo femenino y para las 14:30 horas anunciaron la caminata.
MARCHA PARA PEDIR QUE DEJEN DE VIOLENTAR A LAS MUJERES
Una bomba de humo morada fue la que hizo que todas las mujeres estallaran de alegría y fue así como arrancó la marcha. La persona que dio el banderazo fue una niña de cuatro años, quien dijo que quiere que su mamá regrese siempre viva. Hay que destacar que hubo gran presencia de infancias y ellos guiaron la marcha.
Bebés, niñas, adolescentes, mujeres adultas y mujeres mayores, todas se reunieron para alzar la voz. Unas iban tomándose de la mano, otras sosteniendo sus carteles, brincando. Muy orgullosas portaron su ropa morada y exigieron justicia por las que no están.
Por lo menos una vez en su vida les han chiflado en la calle, un hombre las ha tratado de hacer menos, las han violentado y todas estas injusticias las hicieron pintar paredes, casonas y hasta la catedral. También las impulsaron a romper paraderos de la RUTA con martillos, golpear la fuente de San Miguel hasta quebrarla y colocar stickers en los escudos de los policías, gritar, o hasta llorar.
Transitaron las calles cantando, pidiendo que ya no se asesinen mujeres, que no se toquen a las niñas. Esto atrajo la mirada de los ciudadanos, quienes observaron, cuestionaron, y los hombres insistieron en acercarse, esto a pesar de que se les pidió que solo fuera una movilización femenina.
Las miradas incrementaron cuando llegaron al Centro Histórico, pero también la seguridad. No para brindarle apoyo a las marchantes, sino que para cuidar los inmuebles. Desde que inició la calle Juan de Palafox se pudo ver a cientos de uniformados cuidando las casonas y el Palacio Municipal.
En el zócalo capitalino había personas grabando a las feministas. Los que estaban comiendo en los portales dejaron de hacerlo por observar y así como existieron muestras de respaldo, hubo personas que gritaron: ¿por qué no están cocinando en sus casas?
En algunos negocios regalaron botellas de agua, dejaron entrar al baño de manera gratis. En los balcones salieron a aplaudirles y a decirles que apoyaban su causa. Y al llegar a la catedral de Puebla ya los esperaban grupos católicos para resguardar el templo, empero, las feministas les aventaron pintura. No pasó a mayorees.
PRI CONTRATA UNA CANTANTE; PIDEN NO DISTRAERSE
En la 5 Poniente que es la calle en dónde está el Congreso de Puebla ya las esperaba una cantante en un balcón que interpretó la “Canción Sin Miedo”. Un himno para el feminismo y para visibilizar los feminicidios.
Sin embargo, las organizadoras indicaron que esta mujer fue contratada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que no se dejaran distraer. A la par, una feminista del Frente Radical leyó su pronunciamiento:
Pidieron la abolición de la pornografía, abolición de la prostitución, terminar con los estereotipos y roles sexistas. Que las autoridades dejen de ser cómplices de la trata de personas y exigieron que los policías dejen de vigilar las protestas.
Asimismo, hicieron un recuento de los feminicidios que se han registrado este año: María Eugenia, María del Socorro, Juana, Tania, Rosa María, Marcelina, Isabel, Brenda, María Angelica, Melanie, Yolanda, y una desconocida. Para concluir, dejaron el micrófono abierto y las mujeres denunciaron a violentadores vicarios, acosadores, violadores y feminicidas.
Este medio pidió a la Secretaría de seguridad Pública del Ayuntamiento de Puebla la cifra final de las asistentes, pero al cierre de esta edición, aún no habían podido cerrar el número oficial.
MARCHA DE ORGANIZACIONES LLEGA AL ZÓCALO CAPITALINO
A la par que esta marcha se estaba desarrollando, a las 3:30 arrancó otra movilización en la Fiscalía de nombre “Hasta que la dignidad se haga costumbre”. En este contingente se pudieron ver a las mujeres de la organización 33 Mujeres, la colectiva Cam Cai de madres victimas de violencia vicaria, APPS de diversidad sexual, a las mujeres presas injustificadamente de Pro Niñez, y al Grupo Transgénero.
En esta manifestación sí se permitió que las mujeres trans marcharan y ellas en voz de Gabriela Chumacero pidieron ser visibilizadas, que se les nombre como mujeres y que las autoridades pongan un alto a los trans feminicidios.
De la fiscalía poblana llegaron al zócalo de la ciudad, en donde también ya se encontraba otro contingente de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA), quienes también pidieron visibilizar a las mujeres trabajadoras del campo y comerciantes.
La plancha del zócalo se pintó de morado, se tomaron fotografías, siguieron cantando y después de seguir exigiendo justicia por las asesinadas en Puebla, poco a poco fueron dejando este lugar para concluir el Día Internacional de la Mujer.