Cristo Negro
La devoción al Señor del Hospital se ha extendido por todo el estado
Con una celebración religiosa presidida por el obispo Enrique Díaz Díaz se llevó a cabo la solemnidad del Señor del Hospital a 461 años de su llegada a Salamanca; el obispo pidió contemplar la imagen del Señor del hospital y no tener miedo, confiar en él las esperanzas de todas las personas para superar las necesidades pese a las dificultades y al dolor.
Con una celebración religiosa presidida por el obispo Enrique Díaz Díaz se llevó a cabo la solemnidad del Señor del Hospital a 461 años de su llegada a Salamanca.
En punto de las 12 horas y atendiendo estrictos protocolos sanitarios dio comienzo la celebración para conmemorar la llegada del Cristo Negro a Salamanca. Con una iglesia al 60 % de su capacidad y decenas de fieles en las afueras del recinto religioso, el obispo Enrique Díaz Díaz solicitó un minuto de silencio en memoria de todas las personas fallecidas a causa de la Covid-19.
En su mensaje pidió contemplar la imagen del Señor del hospital y no tener miedo, confiar en él las esperanzas de todas las personas para superar las necesidades pese a las dificultades y al dolor.
Fue un martes 14 de Marzo de 1560 en un hecho histórico y milagroso que el Cristo tomó la tonalidad oscura. La imagen fue traída por Juan Cardona miembro de la tribu otomí del pueblo de Jilotepec hoy Estado de México.
Según los relatos históricos, fue un grupo de indígenas quienes eran seguidos por el cacique del pueblo y venían huyendo para buscarle un hogar al Cristo. Se dice que una noche mientras se refugiaban el Cristo que tenía una tonalidad clara adoptó un tono oscuro para confundirse con la noche y que no pudieran encontrarlo.
El Cristo Negro ha sido testigo de la fe que el pueblo salmantino le ha profesado, pues a él se le ha pedido superar desastres naturales como la inundaciones de 1958, con una súplica para que las lluvias pudieran bajar su nivel y la comunidad pudiera rehacer las casas.
Hace nueve años fue extraída la corona del Cristo una pieza muy antigua y ante el dolor y la tristeza de la feligresía esta se unió para nuevamente colocarle la corona que le fue arrebatada.
La devoción al Señor del Hospital se ha extendido por todo el estado prueba de ello eran los más de 60 mil peregrinos que llegaban a visitarlo durante la Semana Santa, para agradecer por los favores recibidos, hoy pese a la pandemia los salmantinos refrendaron su fe ante una de las imágenes religiosas más veneradas en el municipio.