El Sol de San Luis Potosi

QUE TU LIBERTINAJ­E NO ARRUINE MI LIBERTAD

- PBRO. LIC. SALVADOR GONZÁLEZ VÁZQUEZ

No hay regalo más grande que el don de ser libres.

Todas las acciones humanas tienen su medida y entre ellas está la libertad.

Es preciso encontrar el equilibrio y mantenerse en el justo medio, ahí está la verdadera virtud.

No hay regalo más grande que el don de ser libres. Gracias a esa libertad, el hombre decide lo que quiere hacer con su vida, y no hay amor más auténtico, que aquel que surge de un corazón libre; que decide libremente a quien amar.

Pero hay que aclarar, que no hay libertad absoluta. Es decir, que no somos libres de hacer todo lo que se nos antoja; porque no soy el único que es libre. Hay muchos otros que también

tienen derecho a su libertad. Por eso decimos, que todas las acciones humanas tienen su medida; y entre ellas se encuentra la libertad.

Si todo lo humano es medido, entonces hay que buscar el equilibrio; y mantenerse en el justo medio, porqué ahí, se encuentra la virtud. Aunque no es fácil sostenerse en punto medio. Porque muchas veces el hombre no se sabe medir.

El exceso de libertad se llama libertinaj­e, y eso, es robar la libertad al otro; tu exceso no le deja al otro ser libre. Al defender nuestro derecho de hacer lo que nos venga en gana, le estamos robando al otro su derecho a ser libre. El hombre que está cegado por su libertinaj­e, ignora que su exceso, es un obstáculo para la libertad de alguien más.

La libertad es un don; pero mal usada, se vuelve una desgracia. Una libertad no medida, es dañina. Y cuántos sufrimient­os hemos padecido a causa de una libertad desmedida. Por eso, es necesario tratar de pensar en los demás y ser consciente­s de que una mala acción de nuestra parte, puede afectar la vida de otros. Y no hay que olvidar la regla de oro: “Traten a los demás, como quieren que los traten a ustedes”.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico