“Vivamos la Cuaresma con corazón renovado”
En la arquitectónica Catedral metropolitana potosina se llevó a cabo la bendición e imposición de la Ceniza, rito que presidió el Arzobispo de San Luis Potosí, Mons. Jesús Carlos Cabrero Romero, acompañado del Cabildo Catedralicio compuesto por los Canónigos.
El jerarca dio un mensaje de amor y esperanza para vivir una Cuaresma con un corazón convertido, renovado, contrito, en el que queden fuera de nosotros el odio, la división, el rencor, la venganza, la soberbia, las injusticas, la corrupción, los altercados y discusiones obsoletas, y todo tipo de pecado que nos aparta del Dios y de nuestro prójimo. “Es un tiempo que nos invita al silencio, a estar con Dios a solas, en la intimidad, y a hacer nuevos propósitos para mejorar nuestra forma de vivir, por ejemplo dejar los chismes sin fundamento que tanto daño le han hecho a tantas personas, así como las graves injusticias que hemos cometido hacia otros”.
Con el rito de la imposición de la Ceniza, dio inicio la Cuaresma, periodo de 40 días que nos prepara para vivir en plenitud la Pasión dolorosa, Muerte y gloriosa Resurrección de Cristo Jesús. El Arzobispo dijo que es importante iniciar la Cuaresma con un corazón limpio, trasparente, abierto para amar, perdonar y ser otros, por lo que debemos prometerle un cambio de nuestra parte a Dios. Señaló que es importante vivir en plenitud la Cuaresma, con sentimientos transparentes que nos hagan ser más caritativos
Con el rito con los que menos tienen, pues es un tiempo propicio para ejercer la caridad, procurar la paz, y hablar de penitencia y oración no debe ser cosa del otro mundo, sino de algo que debemos practicar para cambiar nuestra vida de pecado en una vida honrosa a los ojos de Dios.
Por último dijo que cada uno de nosotros debe hacer un detenido y serio autoanálisis de forma muy sincera , para transformar nuestra vida, para recomenzar una vida apegada a Cristo bendito y ver en qué le hemos fallado a Dios, en qué la hemos regado.