A FUEGO CRUZADO
SEIS. Desde el inicio de la pandemia, seis internos han fallecido a consecuencia del Covid19; lamentablemente, en ninguno de los casos se ha podido establecer el origen del contagio, a pesar de los supuestos filtros sanitarios y la restricción de las visitas de familiares.
SIN VISITAS. Lamentablemente, en el caso del reclusorio estatal, sus directivos siguen sin saber actuar ante la pandemia; en este espacio hace tiempo se comentó que al registrase el primer caso el interno enfermo fue confinado a una de las torres, mientras se tomaban caras en el asunto, y finalmente falleció. Actualmente, los reclusos que presentan síntomas son aislados en el área de visita conyugal.
IDENTIFICADA. Qué lamentable que la Fiscalía General del Estado, la famosa FIGE, no desactive los reportes de búsqueda, pues la ciudadanía se queda con la sensación de que son muchos los desaparecidos; ahí está el caso de la mujer que fue hallada sin vida y ya en descomposición en Cerritos, y que resultó contaba con pesquisa desde el 15 de febrero. Fue identificada como Brenda "N.", pero los voceros de esa dependencia ni siquiera se han enterado de ello.
HOMICIDIOS. Lamentablemente, la incapacidad de la famosa FIGE ha quedado demostrada muchas veces; solamente en lo que va del año a su personal se le ha acumulado un total de 16 carpetas de investigación por homicidios, de los que sus policías "de investigación" no tienen ni idea.
A PETICIÓN. Muchos saben que José Luis Urban Ocampo, el militar y responsable de la seguridad en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, suele pedir a instituciones que, en agradecimiento por tal o cual asunto, le hagan entrega en público un reconocimiento por escrito de los que, efectivamente, ya tiene muchos. Lamentablemente, en la práctica las cosas son diferentes cuando se habla de "mantener el orden y la tranquilidad" de los soledenses.
DE MAL, EN PEOR. El allanamiento ocurrido en la Unidad Administrativa Municipal de la capital potosina, dejó en evidencia a los "cuicos" que están de guardia permanente, y es que el responsable entró por la puerta principal y no por una ventana trasera, como se había dicho.