: LOS LADRILLOS AÚN IMPORTAN
apitalistas
Eso es lo que siempre para nosotros”. ha tenido sentido
MORTERO
Briq no es el primer emprendimiento de Alberto. Junto a Cristina Palacios, hoy directora general para México de la proptech Aptuno, fue uno de los fundadores de Aventones, una de las primeras empresas de ride hailing en México.
Luego de vender Aventones a la startup francesa BlaBlaCar en 2015, Alberto se convirtió en su country manager para México, donde duró dos años para luego dedicarse a la consultoría o la fundación de negocios tecnológicos como DisculpeDoctor.com, Rutanet, lunchbreak.com, CuraDeuda o la desarrolladora de software Innku.
Según platica, luego de la venta de Aventones él contaba con el capital para comenzar a invertir en bienes raíces, aunque no en la escala que buscaba, por lo que junto a su socio Juan Carlos Castro empezó a armar la idea del fondeo colectivo enfocado a los bienes raíces.
“Luego de vender, una de las inversiones que hicimos fue en bienes raíces, queríamos seguir haciéndolo pero no teníamos la lana, no éramos millonarios.
Empezamos a juntarnos con amigos y vimos que si éramos ocho nos alcanzaba para algo más, y luego 32. Invertir en inmuebles era una necesidad propia, fue natural juntarnos con más gente y luego usar la tecnología para llegar a mucha más personas”.
Al momento Briq contabiliza 13 mil usuarios invirtiendo, con los cuales se han juntado 850 millones de pesos en inversiones para 75 proyectos. En la cartera financiada figuran proyectos de departamentos y comerciales en zonas de alta demanda en la CDMX como Desierto de los Leones, Narvarte, San Rafael, Portales, Santa Fe, Del Valle, Bosque de las Lomas, así como en las principales ciudades del país.
Según refiere, el modelo está bien alineado con el mercado millennial, el cual busca hacer algo más con su dinero pero al mismo tiempo gusta de tener flexibilidad para cambiar de ciudad de residencia; sin embargo también han llegado inversionistas experimentados.
“El primer perfil que esperábamos era el inversionista primerizo, el que empieza con de mil a 35 mil pesos, pero para nuestra sorpresa han ido llegando inversionistas con mucha experiencia con más de 500 mil pesos y que nos ven como un complemento para su portafolio, casos como los de un inversionista que en lugar de comprar un departamento de cinco millones de pesos decidió invertir en cinco complejos diferentes”.
Parte de este atractivo para inversionistas sofisticados, explica Alberto, es que el modelo de Briq comparte vasos comunicantes con vehículos de inversión inmobiliaria altamente valorados como las fibras, en las que operadores de inmuebles salen a la Bolsa de Valores para financiar proyectos de construcción, como la altamente reconocida Fibra Uno, que opera hoy varias plazas comerciales y torres de condominios.
“La principal diferencia con Briq diría que en una fibra tú no eliges el proyecto en el cual invertir, sino la fibra es la que elige, tienen una naturaleza similar que es democratizar el acceso a bienes raíces pero en Briq el valor de tu inversión no va a depender de la especulación que hay sobre la fibra, va a depender de la especulación que hay sobre ese inmueble en particular”.
Asimismo, con el tiempo constructoras más grandes como Grupo Kiva, GBM Real State, Hyatt, Marhnos o Vinte han recurrido a Briq para financiar proyectos por la tracción que el modelo ha logrado, pues al día de hoy en Briq se pueden concretar fondeos de hasta 50 millones de pesos en cuestión de dos meses.
“Tal vez no vamos a reemplazar a todos sus fuentes de financiamiento de los grandes desarrolladores pero ya somos una más”.
Según comparte Alberto, estos dos últimos años de pandemia han sido benéficos para el modelo de Briq. Se aceleró la adopción de tecnologías digitales entre la población mientras que ésta ha buscado colocar su dinero en vehículos de inversión en tiempos de incertidumbre, como Bolsa.
Sólo en el último año la llegada de inversionistas diarios se triplicó mientras que se logró en términos de capital en crowdfunding 250 millones de pesos, el equivalente al 30% de todo lo acumulado en la historia de la empresa.
Del lado de los desarrolladores, el mercado constructor buscó financiamiento especialmente para pequeños desarrollos habitacionales cercanos a los 10 departamentos, así como en el sector logístico para bodegas.
A diferencia del mercado de valores u otros activos, por su seguridad y sencillez la opción de Briq –dice– se ajusta bien a las necesidades de estos nuevos inversionistas.
“Durante el último año todos los días entraron nuevos inversionistas a un ritmo de tal vez tres veces más que los que entraban antes, Briq resultó algo muy atractivo durante la pandemia porque nos dio oportunidad de comprar o participar en inversiones a precios muy bajos. Vimos mucha gente que invertía durante los momentos más riesgosos en instrumentos más seguros.
“En plataformas como Robin Hood, de préstamos personales o incluso de inversión en startups requieres muchísimo más análisis, mucho más foco y tiene que estar muy pegadito porque tienes que ver cómo se van desarrollando, si te metes en inmuebles es una forma de invertir mucho más tranquila en el sentido de necesidad de atención”.
Con esta inercia Alberto espera pasar este 2022 de 13 mil usuarios activos a 50 mil y alcanzar los 300 millones de pesos recaudados, así como empezar a analizar posibles adquisiciones o alianzas en otros mercados latinoamericanos sin nada concreto al momento.
“Vamos a seguir requiriendo donde vivir hasta el día que tu cerebro lo suban a la nube. Los ladrillos siguen siendo relevantes en nuestra vida real; es decir, físicamente seguimos requiriendo de espacios y pues mientras sigamos viviendo en la realidad mundana, necesitamos ladrillos”, finaliza.
EMPRENDEDOR TECNOLÓGICO
“En lugar de una sola persona con mucho dinero, entre varias juntan dinero para que el desarrollador construya, y una vez que vende paga de vuelta con intereses”