La ciudadanía se forma con un abrazo en la infancia A pocos
días de iniciar el año, los invito a reflexionar sobre nuestros propósitos haciendo un llamado para que, bienestar de la niñez, sea uno de ellos.
En este sentido quise titular esta columna con una frase que escuché hace algunas semanas en una ponencia sobre niñez y que me retumbó en lo más profundo del corazón. En el marco de una celebración tan importante para la infancia, esa tan llena de sueños e ilusiones, nos encontramos con una triste realidad en nuestro país, desde hace tres años nos topamos con un gobierno sin rostro de niñez, el cual lejos de abrazar y priorizar sus necesidades y derechos fundamentales, reflejándolos con seriedad en el centro de las distintas políticas públicas, los ha invisibilizado y les ha dado la espalda.
Iniciaron cancelando el programa de estancias infantiles, en su ridícula obsesión con el pasado, sin justificación, sin ninguna comprobación de corrupción, borraron de un plumazo un programa perfectible con más de 12 años de creación, con oportunidades de aprendizaje y mejora, el cual no sólo ayudaba a millones de madres trabajadoras para que contaran con un espacio seguro mientras luchan por sacar adelante a su familia; porque sí, hay que decirlo fuerte y claro seis de cada 10 hogares en México están dirigidos por una jefa de familia, sino que también brindaba a más de 300 mil niñas y niños la oportunidad de contar con un espacio que cumplía con las características de protección y aprendizaje para su pleno desarrollo desde la etapa más importante para el ser humano: la primera infancia. Ahora entregan dinero sin que este recurso tenga el seguimiento de confirmar que es utilizado en velar por la niñez; ante la peor inflación de los últimos 20 años, seguramente está en otras prioridades…
Lamentablemente el programa de estancias infantiles no fue el único afectado, hay una lista numerosa de programas sociales de atención a niñas, niños y mujeres que fueron cancelados o disminuidos en su presupuesto, se dio un recorte del 75% a los capítulos 2 mil y 3 mil de dependencias que están a cargo de 15 programas destinados a la infancia, entre algunos de ellos se encuentran los siguientes: Programa de Vacunación, Prueba Tamiz Neonatal, Programa Prospera, Refugios para Mujeres Hijas e Hijos víctimas de violencia, Programa de Niñas y Niños Talento y Comedores Comunitarios.
Millones de niñas, niños y adolescentes convertidos en ciudadanos olvidados y sobre todo silenciados. ¿Quién los escucha? ¿Quién los encuesta? Las cifras están ahí y son devastadoras. Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública señalan que 867 niñas y niños fueron asesinados durante 2020.
México ocupa el deshonroso primer lugar en consumo y producción de pornografía infantil y en embarazo de niñas y adolescentes, 67% de la niñez mexicana sufre de algún tipo de violencia y según datos de la OCDE, cada cuatro horas muere un niño con cáncer, al día de hoy se cumplen mil 159 días sin tratamientos para salvar la vida los menores que luchan contra esta enfermedad. Los Niños Guerrilleros y Autodefensas que buscan sobrevivir a otro cáncer, el de la violencia que producen los grupos de la delincuencia organizada.