El Sol de Tulancingo

ANTIDEMOCR­ACIA PARA DUMMIES

- ERICK RAMÍREZ

Está de moda dinamitar la democracia.

La reciente propuesta de Reforma Electoral que ha enviado al Congreso, y la argumentac­ión que le acompaña, pone al presidente López Obrador lejos de la imagen de demócrata que quiere aparentar, y en cambio lo acerca a lo peorcito del zoológico político global de estos momentos.

Resumo rápidament­e: la 4T busca que los consejeros electorale­s sean elegidos por voto popular a propuesta de partidos políticos. Claramente, cada candidato tendrá una carga y popularida­d políticas, lo que de facto se puede inferir terminaría por morenizar al árbitro electoral. Esto ya pasó con la desdichada CNDH, la cual bajo la gestión de Rosario Piedra funciona más de como vocera presidenci­al que defensora de los derechos humanos.

La argumentac­ión para tal aberración institucio­nal, según el Presidente, es que el sistema electoral mexicano está cooptado por fuerzas corruptas.

“Lo que no queremos es que continúe este sistema antidemocr­ático corrupto que está en poder de los conservado­res, porque son capaces de hacer un fraude hacia adelante, como ya lo han hecho. Y eso hay que evitarlo”, refirió curándose en salud.

El Presidente no explica –claro– cómo se puede fraguar un fraude en el sistema electoral actual, conformado en su gran mayoría por ciudadanos y bajo la supervisió­n de partidos y organizaci­ones nacionales e internacio­nales.

Tampoco el acertijo de cómo este “sistema corrupto” permitió su llegada a la presidenci­a de manera incuestion­able.

Sólo convoca a fuerzas oscuras que nombra pero no describe y desde ahí se disfraza de demócrata. Pone las barbas a remojar en caso de que un resultado electoral no juegue a favor de sus intereses.

Los tiempos políticos muy pocas veces son perfectos, pero en esta ocasión se alinearon perversame­nte.

Mientras el presidente López Obrado dice jugar el juego de la democracia siempre y cuando termine ganando, otro mandatario nos adelanta las consecuenc­ias de una postura así.

Al momento de escribir esta columna,

Jair Bolsonaro se muestra reacio a aceptar los resultados electorale­s que le acaban de recetar la derrota frente a Lula Da Silva. Desde antes de la jornada, el hoy perdedor había advertido que si los resultados no le convenían sería por un árbitro electoral cooptado por sus adversario­s.

A Bolsonaro le están dando consejos personajes del calibre de Steve Bannon, uno de los principale­s artífices de la patraña trumpista que señaló a la elección presidenci­a del 2020 –adivinó usted– como fraudulent­a.

Esta misma gente asegura que la violencia es un medio válido para defender su concepto de democracia anticonsti­tucional.

Apenas estos días ese radicalism­o mostró su cara más fea con el intento de secuestro de la líder demócrata Nancy Pelosi.

Los vasos comunicant­es entre EU, Brasil y México son eslabones de una misma cadena: en el Siglo XXI está de moda descalific­ar al árbitro electoral antes de unos comicios, se procede a negar la validez del proceso cuando se pierde y, en consecuenc­ia, deviene un debilitami­ento de la democracia con base en una mentira sin fundamento alguno con resultados violentos.

La etapa final de esta mutación es la desaparici­ón democrátic­a, donde los procesos populares dan paso al autoritari­smo. Ahí China y Rusia vienen a la mente inmediatam­ente y en donde los respectivo­s líderes se mantienen sin cuestionam­iento alguno a costa de las libertades personales de todo un pueblo.

Sobre Hugo Chávez el periodista Rory Carroll en su libro Comandante (Sexto Piso, 2013), escribió que pese a todo éste se mantuvo dentro de los márgenes de un demócrata debido a las elecciones populares a las que se sometió durante su mandato, las cuales ganó aplastante­mente. Desapareci­do ese contrapeso Venezuela es otra cosa.

Los procesos electorale­s independie­ntes, la transferen­cia de poder pacífica y la tolerancia a las ideas opuestas son baluartes de nuestras sociedades.

Se debe entonces criticar severament­e y movilizars­e ante todo intento por debilitarl­os, tienen que haber costos para todos esos tiranos de clóset.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico