Un hombre paga su funeral y se suicida
SAN LUIS RÍO COLORADO, Son."Compa, me di un tiro y no me morí; sálgase, me voy a dar otro", fueron las últimas palabras de Apolonio Rocha Morales, de 66 años, presunto homicida de su expareja y el entonces novio de ésta, quien sumergido en la tristeza por lo que consideraba una traición decidió quitarse la vida de una manera funesta.
Tres meses antes Apolonio acudió a distintas funerarias hasta que Monte Sinaí le ofreció el servicio para trasladar sus restos a Ciudad Juárez, Chihuahua, donde en un futuro familiares lo recibirían para sepultarlo.
En la mente del señor Rocha la idea de la muerte estaba latente. Según la información recopilada por los reporteros, su anterior pareja, Sara, de 50 años, lo abandonó por otro hombre luego de sostener una relación con él por 18 meses.
La mañana del lunes 17 de septiembre Apolonio salió del hotel y tomó un taxi hacia la funeraria donde con anterioridad apartó el servicio para trasladar sus restos a Ciudad Juárez, Chihuahua. Al llegar, fue atendido por Mario, encargado del turno, quien le informó cuánto se debía y pagó con 200 dólares.
"Mario fue a cambiar los dólares a pesos a una casa de cambio que está a una calle; según lo que pudimos ver en las cámaras de videovigilancia, Apolonio se dio el primer disparo a la altura del corazón, pero no murió", explica Héctor Vázquez, propietario del establecimiento.
Héctor afirma que Mario intenta persuadirlo, pero no lo logra y decide salir del lugar y desde la calle escucha el segundo disparo.