La prohibición ha sido un gran fracaso
Si hay algo por lo cual siempre existirá demanda, surgirá un mercado negro que ofrezca la producción para cubrir el consumo
La prohibición de las drogas es la causa primaria, única, de la creación del narcotráfico. Esto significa que es el propio Estado, el que está propiciando la ingeniería de un mercado negro de sustancias ilícitas. Así lo remarcó el expresidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León, durante su participación en el “Diplomado en Política de Drogas”, organizado por el Centro de Investigación y Docencias (CIDE). Previamente había mencionado que “la estrategia basada en la prohibición era incuestionablemente fracasada”.
Lo anterior “no es una simple calificación porque ese fracaso tiene múltiples dimensiones y expresiones, donde lo más dramático es la pérdida de vidas humanas, el daño a la salud de las personas, la afectación en la vida de la gente que directa o indirectamente se han visto afectadas, independientemente del lado de la ley en el que hayan estado, el resquebrajamiento de muchas instituciones y la falla sistemática del Estado de derecho que esto ha provocado, entre otras muchas otras consecuencias”.
Afirmó que “si hay algo por lo cual siempre existirá demanda, se prohíba o no, habrá de surgir un mercado negro que ofrecerá la producción necesaria para cubrir el consumo y obviamente quienes van a llevar a cabo esa tarea serán aquellos que estén dispuestos a violar la ley para estar en esa oportunidad de negocio ilícito, mercado en el que participan los peores elementos de nuestra sociedad, dispuestos a incurrir en las formas más extremas de violencia para llevar a cabo sus actividades”.
De tal forma que “no es suficiente con dejar de criminalizar a los consumidores, tenemos que pensar que el tema no es solamente demanda, es también un asunto de comercio, es decir, no podemos completar nuestra ecuación para proponer
una política pública sensata sino hablamos seriamente de la oferta, lo cual no lleva a pensar en la regulación y no se trata de un modelo de dejar pasar, dejar hacer en cuanto a la producción de drogas, porque en esta sustancias existen diversos grados de peligrosidad”.
Hay que considerar que “el Estado tiene la responsabilidad de regular todo aquello que pueda ser causa de un mal social, por ejemplo, cuando impone multas a la alta velocidad, está regulando por un interés público de salud, de igual forma, tiene todo un aparato para normar los medicamentos, así como todas aquellas actividades peligrosas, y en el caso de las drogas se debe también hacer una regularización ya que una política correcta no debe criminalizar ni prohibir”.