Candidatos, como la Bartola
IMAGINAN BONANZA
“Prometer no empobrece”, recordó Raúl González Alonso, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Aguascalientes, tras analizar algunas de las propuestas realizadas por los candidatos a la alcaldía capitalina, esto, a una semana del arranque de las campañas. Y es que, algunos aspirantes parecen creer que llegarán a ayuntamientos con arcas públicas boyantes, pues realizan propuestas que en teoría requieren de una vasta cantidad de fondos, pero se toparán con gobiernos locales que padecen una severa sequía presupuestaria, por ejemplo, la Ley de Ingresos del Municipio de Aguascalientes para el ejercicio fiscal 2021 contempla una disminución de 80 millones de pesos en comparación con el año anterior. Los candidatos imaginan que entrarán a la bodega de Rico McPato y se toparán con la austeridad franciscana.
ARCAS PÚBLICAS EN CRISIS
Lo anterior no ha impedido que en menos de diez días los candidatos echen a volar la imaginación y hagan propuestas difíciles de cumplir en el papel: colocar una cámara de videovigilancia a las afueras de la totalidad de los hogares que hay en la ciudad (Norma Guel); indemnizaciones millonarias para terminar la concesión de agua potable de manera anticipada (Luis Armando Reynoso); cancelar de un plumazo todos los adeudos de los particulares con la concesionaria, “borrón y cuenta nueva” (Arturo Ávila). Apuestas muy altas, que buscan más el impacto mediático que una política pública sostenible. Hay que recordar que las últimas tres administraciones municipales no han podido arreglar siquiera la mitad de la deteriorada carpeta asfáltica de Tercer Anillo, que no es un tema menor, pues es una de las demandas más frecuentes de la sociedad, al menos, por los automovilistas; lo anterior, lo han atribuido a la falta de recursos.
RECAUDACIÓN Y AUSTERIDAD
Incluso, los candidatos que en el pasado ya fueron alcaldes (Gabriel Arellano y Luis Armando Reynoso) parecen pasar por alto la situación presupuestal que enfrentarán si se ven favorecidos en las urnas por el voto popular, pues hasta la fecha, ningún postulante ha propuesto políticas de mejora recaudatoria (ciertamente un tema impopular), pero tampoco alguien ha esbozado un plan de austeridad en la administración pública municipal para hacer más, con menos (algo tan de moda en el discurso oficial). El próximo alcalde enfrentará un panorama de vacas flacas, donde además ya no podrán acceder a recursos extraordinarios que obtenían vía el Fondo Metropolitano y el Fortaseg, porque son fideicomisos en vías de extinción. A pesar de ello, algunos candidatos están realizando propuestas de altos vuelos, el 6 de junio se conocerá si la población de Aguascalientes valora el realismo u opta por compras sueños de opio.