El United, como en los viejos tiempos
Un show de Bruno Fernandes y Edinson Cavani catapultó al Manchester United, que remontó al Roma (6-2) y que puso a los ingleses con pie y medio en la final de la Europa League en Gdansk (Polonia). Fernandes y Cavani, con doblete de goles y asistencias cada uno, y Pogba y Greenwood, con la guinda del quinto y el sexto gol, anularon a unos italianos que llegaron a liderar el marcador por 1-2 y soñaron con asaltar Old Trafford.
El United saltó a su campo como en los viejos tiempos, aquellos en los que metía miedo a todo el continente. Apenas en los primeros minutos, arrancó Paul Pogba, se fue por potencia de tres jugadores, tocó para Cavani y este tiró una pared para que Bruno Fernandes, el luso que ahora reina en Mánchester, picara la pelota de forma sublime ante la llegada de Pau López.
Era el inicio soñado para el United, pero Pogba complicó la situación, con una mano que Del Cerro Grande señaló como penalti. No falló desde los once metros Pellegrini, aunque estuvo cerca de pararlo De Gea, y la Roma cogió un impulso que provocó que a la media hora se pusieran por delante.
Un desajuste defensivo dejó a Pellegrini solo sin marca dentro del área, se dio la vuelta y puso un pase de la muerte para que Edin Dzeko, ruidoso vecino hace unos años, empujara a placer. La Roma ganaba.
Ya en el complemento, la mejor versión de Edinson Cavani llegó a resctar a los Diablos Rojos. En apenas 20 minutos, un doblete del uruguayo le devolvió la ventaja al United, quien aprovechó el desoncierto de los romanos para liquidar la serie, primero con un gol de penal de Bruno Fernandes y luego, ya en la recta final, Mason Greenwood, recién ingresado, puso el sexto y definitivo. El United metió miedo, como en los viejos tiempos.