Tiene sueño olímpico
EL COI LE OTORGÓ LA PRIMERA PLAZA PARA MÉXICO EN ESA DISCIPLINA; INFLUYÓ SU BRONCE EN PANAMERICANOS DE 2019
No querían entrenarme porque soy mujer, y el reto se volvió capricho, nunca creí que el boxeo me enamorara tanto”
ESMERALDA FALCÓN
BOXEADORA
Una carrera fulgurante ha sido la de Esmeralda Falcón.
La chica de 25 años originaria de Tulyehualco, en la Alcaldía Xochimilco, ha mostrado su casta de guerrera mexicana desde que superó su asma y los prejuicios de los primeros entrenadores de boxeo con los que llegó, porque le pintaron un negro panorama, tanto por su enfermedad como por comenzar a practicar la noble disciplina a los 18 años.
Lo menos que le dijeron es que era una edad tardía porque la carrera de un pugilista es corta.
Hoy, Esmeralda está instalada como la primera boxeadora mexicana en la historia que competirá en Juegos Olímpicos y lo hará en Tokio 2020, en 60 kg.
Para ello, fue determinante su conquista de bronce en los Juegos Panamericanos de 2019 y que un año antes fuese la primera pugilista de nuestra nación en obtener oro en Juegos Centroamericanos y del Caribe.
La Federación Mexicana de Boxeo que preside Ricardo Contreras le notificó ayer que el Comité Olímpico Internacional le otorgó en forma directa la plaza a Tokio 2020.
Solamente existían 16 lugares en todas las divisiones para mujeres en América.
“Es una distinción muy merecida porque Esmeralda ha mostrado esfuerzo, sacrificio, disciplina y creo que aquí está el primer resultado a su esfuerzo”, indicó Contreras.
Según el titular de la FMB, existen esperanzas de que el COI añada otras dos plazas para nuestros púgiles, que recaerían en Brianda Tamara Cruz y Rogelio Romero.
La Pantera Falcón dejó todo en el ring para obtener aquel bronce panamericano que la colocaba entre las 20 mejores del mundo en su división.
“Yo quería hacer Kung Fu, porque mi hermano lo hace; nos gustaba por las películas de Jackie Chan que nos ponía mi papá, y caí en el box. No querían entrenarme, porque ya tenía 18 años, porque soy mujer, y el reto se volvió capricho” confesó Falcón Reyes.
Falcón remarcó que la circunstancia de que el rechazo inicial fue decisivo, porque “ver que es una disciplina en la cual está tan estereotipado y tan ligado el machismo, se me hizo un reto y quise llevarle la contra a todos”.