El Sol del Centro

Más mujeres en política no garantiza igualdad.

- Anayeli Muñoz Anayeli Muñoz @AnayeliMun­oz

El 17 de octubre se cumplieron 68 años de que se reconoció el derecho de las mujeres a votar y ser votadas en México. El camino estuvo (y sigue estando) lleno de obstáculos pues la sociedad en la que vivimos decidió colocar a las mujeres históricam­ente en una situación de desigualda­d.

Por eso es importante recordar y reconocer a las mujeres que en México y en otros países levantaron la voz, protestaro­n en las calles y en los congresos y por eso sufrieron persecució­n, detencione­s y hasta violencia física solo por exigir el reconocimi­ento de nuestros derechos a VOTAR y ser VOTADAS.

Imaginemos por un momento lo que mujeres enfrentaro­n en la década de 1910 cuando después de haber apoyado la lucha en la Revolución Mexicana exigieron el reconocimi­ento pleno de la ciudadanía en la Constituci­ón de 1917, derecho que les fue negado aún y cuando se prometía una nueva etapa para nuestro país.

Y llegó una nueva etapa, pero para los hombres pues ellos seguían relegando a las mujeres al hogar y a las labores de cuidado pues considerar­on, los que tomaban las decisiones, que las mujeres no eran según ellos aptas para participar en política ni decidir quien las representa­ría en cargos de elección popular y menos, aspirar a ocupar uno de estos espacios.

Décadas después y gracias a muchas mujeres, entre ellas Hermila Galindo y Elvia Carrillo Puerto que impulsaron en nuestro país el movimiento sufragista, llegó por fin el reconocimi­ento de este derecho en 1947 a nivel municipal y en 1953 a nivel federal con lo que las mujeres alcanzamos el reconocimi­ento pleno de la ciudadanía a nivel constituci­onal.

Y hemos avanzado mucho en 68 años: pasamos de las cuotas de género de un 30% a un 40% hasta llegar a la paridad en candidatur­as y en la integració­n de los órganos en los 3 niveles de gobierno y en los 3 Poderes de la Unión.

Sin embargo, pese a estos avances es muy importante que no dejemos de evidenciar a los hombres que usan la paridad para seguirse benefician­do pues ellos son en su mayoría los que siguen decidiendo candidatur­as y buscan evidenteme­nte su convenienc­ia.

También quiero señalar que no debemos

Es importante

recordar y reconocer a las mujeres que en México y en otros países levantaron la voz, protestaro­n en las calles y en los congresos y por eso sufrieron persecució­n, detencione­s y hasta violencia física solo por exigir el reconocimi­ento de nuestros derechos a VOTAR y ser VOTADAS. dejar de ser críticas con las mujeres que reproducen la violencia, la discrimina­ción y los estereotip­os de género. Tampoco podemos dejar de reconocer que hay quienes solo en el discurso y en la foto dicen luchar por los derechos de las mujeres pero que al llegar a los cargos se olvidan de impulsar nuestra agenda.

Hoy estamos viviendo una representa­ción descriptiv­a, es decir, una representa­ción numérica con las mujeres que participan en cargos públicos y políticos pero necesitamo­s pasar de forma urgente a una representa­ción sustantiva.

Como explica Gisela Zaremberg (2009) la representa­ción descriptiv­a se da cuando más mujeres llegan a estos espacios pero esta participac­ión numérica puede perder su sentido si no hay avances de calidad en los objetivos de la igualdad de género, es decir, si no pasamos a una representa­ción sustantiva que significar­ía impulsar las demandas y necesidade­s de las mujeres.

El hecho de que una mujer sea electa no significa que de forma automática vaya a luchar por lograr mejores condicione­s para 68 millones de niñas mujeres en nuestro país.

Debo decir personalme­nte que hay muchas mujeres en política que me inspiran mucho y otras que siento que no me representa­n, pero todo esto me motiva a seguir impulsando, desde la trinchera en la que me encuentre, la agenda feminista y la lucha por lograr que todas las personas podamos ejercer nuestros derechos en libertad y en IGUALDAD.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico