ADOPTÓ A JAPÓN EN SU DIARIO VIVIR
La trayectoria del político salmantino dió un vuelco cuando conoció e integró a Japón en su estilo de vida
SALAMANCA, Gto. Si Mazda decidió instalarse en Guanajuato y particularmente en Salamanca fue por él. Su nombre: Antonio Ramírez Vallejo. Antonio Ramírez Vallejo fue presidente municipal de Salamanca y su gestión estuvo marcada por la consolidación de la instalación de Mazda en Salamanca, derivado de la fuerte relación que se sostenía entre México y Japón.
Y es que el mismo Antonio Ramírez Vallejo estuvo dentro de las pláticas de negociaciones para convencer que Salamanca tenía el potencial para albergar a una planta de la talla mundial como Mazda.
Durante el último año de su gestión, en 2012, se colocó la primera piedra de la armadora, para posteriormente, dos años después, iniciar la línea de producción; a raíz este acontecimiento se ha dado continuidad al estrechamiento de estas relaciones con la Prefectura de Hiroshima y sobre todo con Japón por casi una década, expandiéndose, no solo en el sector económico, sino también al político, deportivo, académico, cultural y gastronómico.
Era considerado el presidente municipal más productivo y respetado de los últimos años, gracias a las inversiones extranjeras que generó para Salamanca y la cercanía
ANTONIO RAMÍREZ que tenía con la comunidad japonesa.
Esas características lo hicieron acreedor a diversos reconocimientos, el más reciente fue el pasado tres de noviembre por parte del Gobierno de Japón, donde recibió la Condecoración de la Orden del Sol Naciente, en grado de Rayos de Oro con Escarlata.
es recordado como el alcalde que más inversión extranjera gestionó para Salamanca en su trienio