NAICM: ¿habrá sorpresas el viernes?
Federico Patiño, el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, debe andar nervioso estos días, porque el próximo viernes, luego de dos retrasos, deberá dar a conocer los ganadores de las licitaciones para construir las pistas 2 y 3 del proyecto más grande de la administración de Enrique Peña Nieto: el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM).
Aunque se argumentó que el grupo de especialistas que revisa las propuestas técnicas extendió su periodo de evaluación por asuntos inherentes al proceso, el retraso también tuvo que ver con el Cuarto Informe de Gobierno que presentará el presidente el jueves 1 de septiembre.
Y es que no sólo se trata de la obra de infraestructura insignia de Enrique Peña Nieto, la cual involucra recursos por un total de 180 mil millones de pesos, sino que en el proceso participan algunas de las compañías de construcción más importantes de México y el mundo, algunas cuyos dueños son amigos del presidente o bien han obtenido grandes contratos durante el periodo en el que fue gobernador del Estado de México y en los casi cuatro años que lleva como jefe del Ejecutivo.
Carlos Slim, con su operadora de construcción CICSA; Carlos Hank Rhon, presidente y fundador del Grupo Hermes; Olegario Vázquez Aldir, con Prodemex; David Peñaloza, mandamás de Pinfra, y Juan Miguel Villar Mir, accionista principal de la española OHL, son algunos de los empresarios que participan en las licitaciones para construir las pistas 2 y 3 del NAICM, proyectos que involucran inversiones de alrededor de 8 mil millones de pesos cada uno.
Indirectamente, Carlos Slim ya tiene una huella en el proyecto a través de su yerno Fernando Romero, quien junto con el mundialmente reconocido Norman Foster ganó la licitación para diseñar el NAICM.
Sin embargo, el multimillonario mexicano es quizá el empresario menos favorecido en lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto, luego de que su emporio América Móvil fue declarado un agente económico preponderante en el sector de telecomunicaciones hace dos años. De entonces a la fecha, Slim ha perdido unos 25 mil millones de dólares en los mercados de valores, debido principalmente a las regulaciones aplicadas a sus empresas Telmex y Telcel en México.
Por eso, los contratos para construir algunas de las obras más importantes del NAICM, como lo son las pistas, podrían ayudarle a compensar una parte del dinero que se esfumó de su bolsa estos dos años. Slim, además, va en alianza con otros dos multimillonarios mexicanos: Carlos Hank Rhon, con grandes negocios en construcción, turismo, energía y el sector financiero; y Olegario Vázquez Aldir, dueño de cadenas de hospitales, de hoteles, bancos y quien está en vísperas de poner al aire una cadena de TV abierta.
Slim (CICSA), Olegario Vázquez (Prodemex), Carlos Hank (La Peninsular) y Jerónimo Gerard (GIA) van en consorcio por las pistas 2 y 3 del NAICM con una propuesta económica de 7 mil 979 millones de pesos y 7 mil 359 millones, respectivamente. No es la oferta más barata, y además compite con otros 18 consorcios nacionales e internacionales. Sin embargo, los aspectos técnicos, la experiencia en el desarrollo de este tipo de infraestructura y la capacidad financiera de los concursantes tienen un peso de 50% en la decisión. Y es ahí donde los nombres pesan.
Otro consorcio relevante es el que formaron la española Acciona y Pinfra, la constructora mexicana que más contratos ha ganado en los últimos años y la que más vale en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV): cerca de 95 mil millones de pesos, gracias a que sus acciones se han revaluado 220% en los últimos cuatro años. Este conglomerado hizo una oferta de 7 mil 755 millones de pesos por la pista 2 y de 7 mil 580 millones por construir la pista 3 del NAICM.
OHL también le entró con su subsidiaria Constructora de Proyectos Viales de México. Según los directivos de la firma en el país, participa directamente su matriz española, por lo que la emisora listada en la BMV no se beneficiaría si gana alguna o las dos pistas. Como sea, Juan Miguel Villar Mir, su dueño, es un viejo conocido del presidente Peña Nieto y de otros integrantes y exintengrantes de su gabinete, como Gerardo Ruiz Esparza y Emilio Lozoya. Su oferta es de 8 mil 495 millones de pesos por la pista 2 y de 9 mil 283 millones por la pista 3.
Y finalmente, otro conglomerado con grandes posibilidades de quedarse con alguno de los proyectos es el que integran la portuguesa Mota-Engil y las mexicanas IDINSA, Grupo Jaguar e ICA, la atribulada empresa que preside Bernardo Quintana, la cual podría ‘revivir’ si obtiene alguno de estos contratos. Este consorcio puso sobre la mesa 7 mil 792 millones de pesos por la pista 2 y otros 7 mil 740 por la pista 3.
Federico Patiño, director general del GAICM, la empresa responsable de construir, administrar y operar el nuevo aeropuerto, ha asegurado que su prioridad es la transparencia. Y tal vez sí, pero será difícil que si estos consorcios resultan ganadores, los medios, los competidores y la oposición política no insinúen que los dados estuvieron cargados.