X-Trail 2018: lo que funciona, se retoca
Buenos trucos tecnológicos y un facelift preciso relanzan a la SUV mediana superventas
Sí, es solo un retoque visual. Y en un mercado de competencia feroz como el de las SUV medianas, esa lavada de cara superficial puede ser catastrófico. Pero es muy difícil que a la X-Trail 2018 no le resulte la jugada redonda. Por dos razones: 1. La ‘lavada de cara’ es bastante inteligente y, aunque parezca contradictorio, profunda (es un peeling, digamos). 2. Propone, de hecho, rasgos y soluciones completamente nuevos, en el campo de la seguridad. 3. Es la líder ya. Esta tercera generación volvió locos a los consumidores mexicanos y del mundo al instante. En 2015 fue el vehículo más vendido de Nissan en el mercado global. Eso es decir mucho. Autoconfianza no le falta.
Pero a ver: precios, precios. Por la versión base, Sense, con dos filas de asientos: $382,200. Con tercera fila de asientos, $398,100. Por la versión Advance, $435,900 con dos filas de asientos; por tres filas, $452,100. Por la versión superior, Exclusive, $493,000 con dos filas de asientos y $515,200 por tres. El escudo de seguridad. Más de medio millón de pesos por una SUV mediana parece difícil de tragar, pero he aquí lo que incluye la Exclusive tope de gama: tracción inteligente 4x4, rines de 19’’, asistente de descenso de pendientes, un sistema de audio Bose con ocho bocinas (acoplado a un sistema de infoentretenimiento con conectividad smartphone, una de las más prácticas que hemos probado) y, muy importante, varios elementos del sistema Nissan Intelligent Safety Shield que merecen capítulo aparte. Nos impresionaron, por su eficiencia de funcionamiento, el monitor de visión periférica (el sistema de cuatro cámaras que ofrece una visión 360° del vehículo) y la alerta de colisión frontal, que regala una advertencia en caso de desaceleración repentina de hasta dos vehículos adelante. Dosis extra de agresividad. En el renglón del diseño exterior un detalle que parece insignificante es del todo elocuente: las calaveras traseras carecen ya de esos filos de cromo que le restaban tanta elegancia, a nuestro entender. Ahora son más sobrias, en acabado ahumado. Al frente, lleva a sus últimas consecuencias el lenguaje de diseño V-Motion. Ya saben: la parrilla con forma de 'V' (ahora crece, se profundiza). Hay líneas cromadas que acentúan los bajos laterales y la parte inferior trasera.
En el interior destaca el volante: acertadísimo rediseño. Tiene forma en 'D', es decir, en la parte inferior la circunferencia se achata, lo que además de reflejar deportividad procura ascensos y descensos del habitáculo más cómodos.
No hay cambios en la motorización. Es el mismo 2.5 litros con 169 caballos de fuerza y 172 libras-pie de torque, con su sistema de control de sincronización de válvulas con variación continua. Y la conocida transmisión CVT con un modo de cambio manual.
En la familia de SUV y crossover Nissan, solo la X-Trail faltaba de poner al día. Ya es lo mejor que puede ser en este ciclo de vida. Con eso le bastará para competir más que bien.