Incertidumbre política amenaza a la economía
Inseguridad e inflación también son riesgos: encuesta de Banxico Analistas consideran que coyuntura no es propicia para inversiones
La incertidumbre política interna del país se ubicó entre los principales factores que pueden obstaculizar el crecimiento económico nacional, advirtieron analistas del sector privado consultados por Banco de México.
Esta inquietud, que por muchos meses no figuraba en la lista de preocupaciones de los expertos en economía, aparece a días de las elecciones en cuatro estados.
De acuerdo con la encuesta de mayo que recaba el banco central, los 36 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero que participaron calificaron con 5.1 a la incertidumbre política interna como preocupación para frenar el desempeño de la actividad productiva.
Banco de México detalla que una nota de 1 en el nivel de preocupación refleja que es un tema poco limitante para el crecimiento económico, y 7 significa que es muy limitante.
Sólo por encima de este factor se ubicaron los problemas de inseguridad, con una evaluación de 5.3; la plataforma de producción petrolera también fue calificada con 5.1.
Es en este ambiente que 47% de los encuestados reconoció que la coyuntura no es propicia para las inversiones, mientras que 18% opinó que sí lo es y 35% dijo no estar seguro.
Aunque el consenso de analistas elevó el pronóstico de crecimiento de 1.7% a 2% para este año, ocho de cada 10 afirmaron que la economía no está mejor que hace un año.
La inflación, otro factor que puede obstaculizar el crecimiento económico de México, continuó en deterioro. Los expertos ajustaron al alza las expectativas de cierre de este indicador, al pasar de 5.7% a 5.9%.
A unos días de las elecciones en cuatro estados del país, analistas consultados por el Banco de México (Banxico) advirtieron que la incertidumbre política interna será una limitante para el crecimiento de la economía.
La incertidumbre política repuntó, cuando hace meses no figuraba entre los obstáculos para la economía.
Por ejemplo, en diciembre pasado y en enero de 2017 ningún experto hacía alusión a este tema cuando se les cuestionaba sobre los factores que pueden obstaculizar el crecimiento.
Este factor también despuntó en el nivel de preocupación que le dan los especialistas, al pasar de 4.9 en la encuesta de abril a 5.1 en la de mayo.
De acuerdo con Banxico, el nivel de preocupación 1 refleja que un tema es poco limitante para el crecimiento y 7 significa que es muy limitante.
Además de la incertidumbre política interna, los 36 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero consultados por el Banxico expresaron que también preocupan la inseguridad y la inflación.
Por ello, en la percepción del entorno económico, 47% de los especialistas consideró que la coyuntura no es propicia para las inversiones, sólo 18% piensa que es un buen momento y 35% manifestó no estar seguro.
A pesar de que el consenso de analistas elevó de 1.7% a 2% el pronóstico para el Producto Interno Bruto (PIB) de este año, ocho de cada 10 afirmó que la economía no está mejor que hace 12 meses.
Los analistas advirtieron que el avance en la economía no se verá reflejado en la creación de empleos, pues mantuvieron su cálculo de 650 mil puestos de trabajos registrados en el IMSS para 2017.
Hacia adelante, sólo 30% estimó que el clima de negocios mejorará en los próximos seis meses, por lo que no varió el pronóstico de 2.2% para el crecimiento de la economía para 2018.
De los 10 principales elementos que se toman en cuenta como obstáculos para el desarrollo de la actividad económica, seis son aspectos internos y tienen el mayor peso porcentual, como la inseguridad pública, las presiones inflacionarias y la plataforma de producción petrolera.
Al calificar las presiones inflacionarias en el nivel de preocupación, los expertos le asignaron 4.9 puntos.
Por esa razón subieron las expectativas inflacionarias de corto plazo; para 2017 el Índice Nacional de Precios al Consumidor cerrará en 5.9% cuando hace un mes calculaban 5.7%.
En 2018 ven una inflación de 3.84% mayor a 3.70% proyectado en abril.
Anticiparon que noviembre va a ser el mes con la inflación más alta, con un crecimiento de los precios al consumidor de 0.73%.
Por consiguiente están previendo que el Banxico apriete más la política monetaria. Para 2017 la tasa de fondeo bancario la situaron en 7.25% frente a 7% de hace un mes; para 2018 la tasa de interés pasará de 7.20% a 7.25%.
Mientras que el consenso de analistas mejoró el pronóstico para la economía nacional, recortó el PIB esperado para Estados Unidos de 2.2% a 2.1% en 2017, y para 2018 lo mantuvieron en 2.40%.
En la parte de finanzas públicas, se notó el efecto del remanente de operación del Banco de México, al prever un menor déficit fiscal de 1.4% del PIB frente al 2.5% anterior.
Hay empresas que pueden estar subiendo precios de sus productos más allá de lo prudente como efecto de la depreciación del tipo de cambio, afectando con ello la inflación, observó el Banco de México (Banxico).
Advirtió que debido al efecto del rezago del reciente aumento en las tarifas del transporte público, es probable que la inflación se lleve una sorpresa en los próximos meses.
Así lo plantearon los integrantes de la Junta de Gobierno del banco central, de acuerdo con la minuta número 51 de la reunión que se llevó a cabo con motivo de la decisión de política monetaria el pasado 18 de mayo en la cual subió la tasa a 6.75%.
La decisión de apretar en 25 puntos base el costo del dinero, se tomó de manera unánime
Profundizando en las razones detrás del deterioro en la inflación, la mayoría de los miembros consideró que recientemente el traspaso del tipo de cambio a los precios subió.
Uno de ellos, argumentó que dada la naturaleza de algunos aumentos, cabe la posibilidad de que ciertas empresas que tienen poder de mercado estén aprovechando la circunstancia para elevar los precios más de lo que sería razonable en algunos sectores.
La junta prevé que la inflación general anual continuará afectada temporalmente, en particular por el incremento en las tarifas de autotransporte y de productos agropecuarios.
Algunos alertaron que puede haber un mayor traspaso del tipo de cambio a los precios, en especial señalaron que el hecho de que la definición de la relación comercial en Norteamérica pudiera tardar varios meses.
Reflación. Otro subrayó que la definición de la postura de Estados Unidos en materia de política comercial se vislumbra aún lejana, y añadió que parece razonable descartar los escenarios más adversos, a la luz de declaraciones recientes de algunos funcionarios y de la compleja situación política de ese país; sin embargo, recalcó que los riesgos en este sentido no se han disipado.
La junta precisó que luego de haberse observado un aumento en las expectativas de crecimiento e inflación en Estados Unidos y a escala mundial, así como un incremento en los precios de activos financieros —situación conocida como “reflación”, que contribuyó a mi tigar preocupaciones sobre un posible estancamiento secular— se ha observado recientemente una reversión parcial, sobre todo en el precio de los activos.
Efecto aritmético. De acuerdo con el relato de la minuta, uno opinó que las cifras de crecimiento del PIB para el primer trimestre de 2017 están influidas por efectos aritméticos, indicando que una vez que se diluya este efecto, la desaceleración de la actividad económica debería observarse.
Tensiones geopolíticas. Otro miembro añadió que si bien los recientes resultados electorales en Francia y un diálogo más constructivo entre Estados Unidos y China pueden atenuar el nerviosismo al respecto, aún queda pendiente conocer el resultado de algunos procesos electorales relevantes en Europa, así como los efectos de la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
La mayoría señaló como riesgo adicional las crecientes tensiones geopolíticas en diversas regiones, pero uno de ellos, advirtió que pueden agudizarse generando sorpresas económicas negativas en algunas de las principales economías.
¿Pasó lo peor? Un integrante de la Junta de Gobierno afirmó que en Estados Unidos hay un sentimiento de que lo peor de la crisis financiera global se ha superado.
Pero la mayoría sostuvo que la evolución de la economía en este país puede verse afectada de manera importante por las políticas adoptadas por la nueva administración, por lo cual no deja de haber ciertos elementos de fragilidad provenientes de la incertidumbre política.