Piden a Europa hacer más ante violencia en AL
Contribución del bloque no está a la altura de compromisos hechos, señala análisis
La contribución de la Unión Europea a la lucha contra la violencia y sus impactos en América Latina no está a la altura de los compromisos asumidos y los desafíos que enfrenta la región, de acuerdo con un análisis del Instituto de Estudios de Seguridad de la Unión Europea.
Para muestra un botón: el programa plurianual de cooperación para América Latina, que incluye todos los rubros de colaboración, para el periodo 2014-2020 suma 925 millones de euros, lo que “que equivale a sólo 0.1% de lo que costó la violencia en la región en 2015”. Señala que el monto no se ha ajustado pese a que el año pasado la UE lanzó su Estrategia Global en la que “reafirmó su voluntad de ampliar y profundizar la cooperación con los países de América Latina y El Caribe, en particular en la consolidación de la paz y el fomento de la seguridad”.
El llamado a una “Unión más responsable”, toma aún más relevancia ante la situación en Venezuela, donde la intensificación de la violencia política y económica ha exacerbado los problemas económicos “llevando al país al borde de una crisis humanitaria”. En Venezuela el PIB se ha contraído 18.7%, la inflación se ha disparado 800%, los índices de mortalidad infantil y maternal se han disparado 30% y 60% respectivamente, los casos de malaria han crecido 76% y por su escasez, alimentos y medicinas se han convertido en moneda de cambio en un contexto de acritud política. Simultáneamente la violencia ha ido en aumento, y su costo estimado en la economía venezolana alcanzó los 79 mil millones de dólares en 2015 (42.8% del PIB).
El estudio destaca que la comunidad europea no sólo debería involucrarse más en Venezuela. América Latina “puede considerarse la región más violenta del mundo, en particular cuando se mide por niveles de homicidio”. Tomando como referente a la Oficina de Naciones Unidas contra las Drogas y la Delincuencia, en 2015 se registraron 24 homicidios por 100 mil habitantes, casi cuatro veces por encima de la media global y el doble del número de fallecimientos mundiales a causa de epidemias. “Como región alberga menos de 8% de la población mundial, pero genera 33% de los homicidios globales”.
Tan sólo México, Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala y Venezuela representaron uno de cada cuatro asesinatos intencionales en el mundo en 2016. La región alberga 23 de las 25 ciudades con mayor número de homicidios a nivel mundial. “Ante la próxima cumbre UE-América Latina [a celebrarse en octubre en San Salvador], esto debe servir como un recordatorio sobre la necesidad de ajustar los gastos de contención de la violencia en los países latinoamericanos más violentos”.