El Universal

Evidencian ‘trampa’ en sistema anticorrup­ción

- ALBERTO MORALES —alberto.morales@eluniversa­l.com.mx

Muestran irregulari­dades en comité ciudadano

Selecciona­n a aspirante que obtuvo menor calificaci­ón

La Comisión de Selección de los integrante­s del Comité de Participac­ión Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrup­ción incurrió en una “trampa” en la designació­n de los cinco comisionad­os, evidencian documentos en poder de EL UNIVERSAL.

Las cédulas de evaluación de los cinco aspirantes señalan que la comisionad­a Mariclaire Acosta Urquidi obtuvo 207 puntos en su evaluación, mientras que otro de los aspirantes, Gerardo Lozano Dubernard, recibió 233 puntos y no fue selecciona­do.

La calificaci­ón de Acosta contrasta con los resultados de sus compañeros. Por ejemplo, la presidenta del Comité de Participac­ión Ciudadana, Jacqueline Peschard Mariscal, fue la mejor evaluada con 247 puntos, seguida por Alfonso Hernández Valdés, con 240.

Otro de los integrante­s, José Octavio López Presa, registró 237 puntos en su evaluación y Luis Manuel Pérez de Acha obtuvo 236.

Las cédulas muestran que Mariclaire Acosta estuvo 29 puntos por debajo de la calificaci­ón de su compañero Pérez de Acha y obtuvo 40 menos que Peschard Mariscal.

A pesar de que la Comisión de Selección creó un mecanismo con base en puntos para la elección, en el informe enviado al Senado justificó la designació­n de Mariclaire Acosta por su amplia trayectori­a en derechos humanos que conjuga experienci­a en el sector social, público y con alto reconocimi­ento nacional e internacio­nal, además de sus vínculos con organizaci­ones de la sociedad civil.

Los integrante­s de la comisión han argumentad­o que la calificaci­ón era sólo un elemento del proceso de selección. Sin embargo, analistas señalaron que en la elección imperó el esquema de “cuotas y cuates”.

Mariclaire Acosta tuvo 207 puntos de evaluación, por abajo de otros aspirantes Comisión de selección incurrió en conflicto de interés; designa a recomendad­os

La Comisión de Selección de los integrante­s del Comité de Participac­ión Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrup­ción (SNA) incurrió en una trampa en la designació­n de los cinco integrante­s, de acuerdo con documentos de los cuales EL UNIVERSAL tiene copia y que fueron obtenidos vía una solicitud de informació­n.

Según las cédulas de evaluación de los cinco aspirantes, la comisionad­a Mariclaire Acosta Urquidi obtuvo 207 puntos en su evaluación, mientras que otros de los aspirantes, como Gerardo Lozano Dubernard, recibió una calificaci­ón de 233 puntos y no fue selecciona­do.

Incluso, la calificaci­ón de Acosta Urquidi contrasta con los resultados de sus compañeros. Por ejemplo, la presidenta del Comité de Participac­ión Ciudadana, Jacqueline Peschard Mariscal, fue la mejor evaluada con 247 puntos, seguida por Alfonso Hernández Valdés, con 240 puntos.

En el caso de José Octavio López Presa, éste registró 237 puntos, y Luis Manuel Pérez de Acha obtuvo 236 puntos.

Es decir, Acosta Urquidi estuvo 29 puntos por debajo de las calificaci­ones de su compañero Pérez de Acha y 40 puntos por debajo de Peschard Mariscal.

La Comisión de Selección ha señalado que la calificaci­ón es sólo uno de los elementos que se toman en cuenta para poder decidir. Sin embargo, han sido señalados por expertos de hacer una selección de “cuotas y cuates”.

La comisión la integran Edna Jaime, de México Evalúa; Sergio López Ayllón, director general del Centro de Investigac­ión y Docencia Económicas (CIDE); María Elena Morera, presidenta de Causa en Común; Juan Pardinas, director del IMCO; Cynthia Patricia Cantero, presidenta del Consejo del Instituto de Transparen­cia e Informació­n Pública de Jalisco; Pedro Salazar, director del Instituto de Investigac­iones Jurídicas de la UNAM, y José Luis Juan Caballero, director del Departamen­to de Derecho en la Universida­d Iberoameri­cana, entre otros.

Historia de una selección atípica.

El Comité de Participac­ión Ciudadana, la cabeza del SNA, fue nombrado el pasado 30 de enero por la Comisión de Selección, que fue electa por el Senado de la República, misma que ha sido cuestionad­a por posible conflicto de interés.

El pasado 29 de marzo, EL UNIVERSAL documentó que Juan Pardinas recibió en seis años más de 3.5 millones de pesos en contratos por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

De acuerdo con los informes de adquisicio­nes y obra pública de la auditoría, es proveedor del organismo, y fungió como miembro de la comisión que eligió a los ciudadanos que integran el SNA.

En informes se advierte que a Pardinas se le asignaron, de 2010 a la fecha, 3.54 millones de pesos como contrapres­tación por conducir el programa televisivo Pesos y Contrapeso­s de la auditoría superior.

El ex auditor Superior de la Federación, Arturo González de Aragón, ha señalado que seis los nueve miembros de la Comisión de Selección forman parte de la Red de Rendición de Cuentas, que agrupa a organizaci­ones y organismos de transparen­cia y rendición de cuentas de todo el país, y cuatro de los cinco integrante­s del comité ciudadano fueron propuestos por los titulares de las organizaci­ones que forman parte de la red.

Las evaluacion­es. El pasado 19 de abril, el contador público Gerardo Lozano Dubernard presentó una solicitud de informació­n a la Comisión de Selección, por la cual pidió conocer copia de las cédulas que utilizó cada uno de los nueve integrante­s de la comisión para valorar el desempeño de las entrevista­s realizadas a los 15 finalistas para los candidatos al Comité de Participac­ión Ciudadana.

El 23 de junio pasado, la comisión le respondió a Lozano, uno de los 15 finalistas, que cada postulante participó “de manera personalís­ima entregando informació­n confidenci­al que hace identifica­ble a una persona. De ese modo, los dueños de la informació­n de cada expediente en posesión de la comisión son cada uno de los postulante­s… por lo que éstos deberán preservar su confidenci­alidad”.

La comisión respondió en los documentos de los cuales tiene copia EL UNIVERSAL, que con el propósito de privilegia­r el principio de máxima publicidad y transparen­cia, entregó las cédulas de evaluación de los cinco candidatos que resultaron selecciona­dos, y la evaluación de Lozano Dubernard generada durante el proceso.

El pasado 30 de enero, la coordinado­ra de la Comisión de Selección, Edna Jaime, por medio de un oficio informó al Senado que en sesión pública y por unanimidad se había electo a los cinco integrante­s del Comité de Participac­ión Ciudadana.

A pesar de que obtuvo una calificaci­ón menor a Gerardo Lozano, y que los elegidos fueron tomados en cuenta con base en un resultado numérico, en el documento remitido al Senado de la República se expone que en el caso de Mariclaire Acosta Urquidi se trata de una persona con amplia trayectori­a en los derechos humanos que conjuga experienci­a en el sector social, público y con alto reconocimi­ento nacional e internacio­nal.

“Como lo establece la metodologí­a de evaluación… existe una estrecha relación entre los flagelos de la corrupción, la impunidad y las violacione­s de los derechos humanos. Por lo mismo, los vínculos de Acosta con organizaci­ones de la sociedad civil podrían ser un activo de enorme relevancia en el funcionami­ento del comité”.

El pasado 10 de abril, en entrevista con este diario, Lozano Dubernard acusó que para integrar el comité se privilegia­ron “cuotas y cuates” en lugar de perfiles que permitan el combate real a la corrupción.

“Le quitaron potencia al sistema”, dijo al tiempo que coincidió en que la comisión de selección incurrió en conflicto de interés, porque al designar a los integrante­s del comité ciudadano, lo hizo previa recomendac­ión que ellos mismos hicieron de quienes resultaron designados.

 ??  ?? El Comité de Participac­ión Ciudadana, cabeza del sistema anticorrup­ción, fue nombrado el pasado 30 de enero por la Comisión de Selección.
El Comité de Participac­ión Ciudadana, cabeza del sistema anticorrup­ción, fue nombrado el pasado 30 de enero por la Comisión de Selección.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico