Manual para separar basura
Mañana inicia en la capital separación de desechos en cuatro categorías Sedema apuesta a disminuir los envíos a los diversos rellenos sanitarios
La aplicación de la nueva norma de separación de residuos es el preámbulo para la puesta en marcha de las Plantas de Termovalorización y Biodigestión.
Tanya Müller, secretaria del Medio Ambiente, indicó que antes de iniciar operaciones en ambas plantas, es necesario que desde los hogares se haga una correcta separación de los residuos, para lo cual no basta sólo con hacerlo en orgánicos e inorgánicos.
“Lo que queremos, sobre todo, es reducir en los residuos que no son basura y que hoy en día —porque no los separamos— están llegando al relleno sanitario. Es parte de una política integral de la Ciudad de México con Basura Cero; ya salió la licitación para la Planta de Termovalorización y para ella tenemos que hacer la separación de todos los inorgánicos no reciclables, que es con lo que se va a generar la energía para el Metro; todos los orgánicos para los nuevos biodigestores, donde también vamos a generar energía, pero si no separamos, no podemos aprovecharlos y todo se va al relleno sanitario.
“Cuando tu mezclas lo orgánico, que tiene mucha humedad, con lo inorgánico, tienes una mezcla que ya no permite la separación y no se puede utilizar ninguno de los dos en un proceso de reciclaje o de generación de energía y lo tenemos que mandar al relleno sanitario, lo que ya no queremos”, explicó la funcionaria.
La Norma NADF-024-AMBT-2013, que entra en vigor este 8 de julio, establece que la basura deberá separarse en cuatro categorías: orgánicos, inorgánicos reciclables, inorgánicos no reciclables y de manejo especial o voluminosos.
En los orgánicos se ubican los restos de comida, jardinería, así como de café y té (con todo y filtros de papel); los inorgánicos reciclables son aquellos que pueden volver a ser aprovechados como el papel, plástico, vidrio y cartón; televisores, computadoras, celulares, muebles corresponden a los de manejo especial y voluminosos.
Bolsas de frituras, calzado, colillas de cigarro, toallas sanitarias, unicel y material de primeros auxilios como curitas y algodón, clasificados como inorgánicos no reciclables, serán los que luego de pasar por la Planta de Termovalorización generen energía eléctrica para el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, así como para el alumbrado público de la ciudad.
Los orgánicos, en una segunda etapa, serán enviados a la Planta de Biodigestión, próxima a licitarse. Sanciones. En entrevista con EL UNIVERSAL, la secretaria del Medio Ambiente reiteró que de inicio la aplicación de esta nueva norma no contempla sanciones, imponerlas o no dependerá de los resultados que se obtengan en su primer año de evaluación.
“Vamos a estar en evaluación, vamos a ver cómo se dan los cambios (…). Es un proceso, es un tema en el que todos tenemos que estar convencidos de participar. Vamos a estar evaluando, cada año hacemos un estudio, creo que eso nos dará un parámetro. Ahorita la norma como tal, la implementación de la norma no tendrá sanciones, queremos dar este primer periodo de conocimiento de que todos nos podamos ajustar a la nueva forma de separación de residuos”, afirmó.
La funcionaria aseguró que para garantizar la correcta aplicación de la norma se ha brindado capacitación al personal de limpia del Gobierno capitalino, así como a habitantes de unidades habitacionales, escuelas y trabajadores de empresas privadas.
Precisó que, de manera particular, en las 16 delegaciones se han brindado un total de 45 cursos para quienes están encargados de la recolección.
Además, se destinó una inversión de más de 5 millones de pesos por parte de la Sedema para poner en marcha una campaña de difusión sobre las nuevas medidas. También se desarrolló la aplicación Basura Cero, disponible para teléfonos celulares iOS y Android, la cual permite a los usuarios “practicar” en la separación de los residuos.
Sin embargo, señaló Tanya Müller, esto sólo representa 50% de las acciones necesarias para que la norma se cumpla, el resto es responsabilidad de los ciudadanos.
“Cada vez hay una mayor conciencia ambiental y sabemos que para tener avances en temas ambientales, justamente tenemos que participar. Gobierno tiene su responsabilidad, nosotros tenemos que poner las normas, ver la parte operativa pero también como ciudadanos tenemos que participar, depende mucho de que estemos dispuestos a cambiar hábitos”, enfatizó.
Recolección. La titular de la Sedema aclaró que la aplicación de la Norma 024 no implica modificaciones en el proceso de recolección. Así, los martes, jueves y sábado serán recibidos los residuos orgánicos; inorgánicos reciclables y no reciclables, los lunes; miércoles, viernes y domingos, los de manejo especial y voluminosos o “triques”, los cuales también serán recibidos los domingos.
“Estamos pidiendo que en una bolsa se pueda entregar todos los orgánicos reciclables como PET, aluminio, cartón, tetra pack y en otra bolsa los orgánicos no reciclables. Las fechas de recolección se mantienen como están desde 2011. (…) No hay ningún costo, pero sí pedimos a los ciudadanos que cualquier irregularidad lo puedan reportar al 072”, dijo.
Cada día en la Ciudad de México se producen casi 13 mil toneladas de basura de las cuales 2 mil 500 son utilizadas para la elaboración de composta, una cantidad similar es enviada a cementeras para generación de energía y el resto, poco más de 8 mil toneladas, terminan en rellenos sanitarios donde ya no pueden ser aprovechadas.
Al aplicar las nuevas medidas, “lo que buscamos es que realmente podamos hacer esta separación en cuatro fracciones, sobre todo cuando sabemos que 50% de la basura que se genera en la Ciudad de México, es decir, de las 13 mil toneladas que todos los días se generan en la Ciudad, proviene de nuestras casas. De ahí la importancia que como ciudadanos podamos ser corresponsables”, indicó Müller.
Señaló que actualmente sólo 15% de los residuos inorgánicos reciclables son aprovechados, el resto, pese a que aún tienen utilidad, son enviados a los rellenos sanitarios. “Esperamos se duplique la separación y llegar a un 30% en un periodo de un año”, apuntó. Mientras que a largo plazo, el objetivo es dejar de enviar las 8 mil toneladas de basura a los rellenos sanitarios.
“Tenemos la parte normativa, la parte educativa y de infraestructura, con la licitación de la Planta de Termovalorización, está pendiente la de Biodigestión, con ello se lleva un muy buen avance del programa Basura Cero, considerando que aún quedan alrededor de 500 días para esta administración, la siguiente podrá dar continuidad en el manejo de la basura”, agregó.