Los colores del otoño
Destinos internacionales para observar el cambio de tonalidad en el follaje
Cada año, los viajeros enloquecen por este momento. Cuando el otoño se aproxima y es cuestión de días para que las hojas de los árboles se tiñan de colores dramáticos. Rojos y amarillos encendidos, marrones e incluso púrpura. Hasta hay quienes planean sus vacaciones en fechas que coincidan con este espectacular proceso.
Por esta razón, elegimos cuatro destinos extranjeros ideales para atestiguar el fenómeno de la naturaleza. Destacan por lo extraño de su paisaje o por la importancia que en el sitio se le da a la temporada. Nueva Inglaterra Probablemente, esta región (que comprende seis estados) localizada al noreste de Estados Unidos es el sitio más famoso del mundo para buscar el cambio de color. En primer lugar, esto se debe a que reúne las condiciones ideales, no solo de clima: por ejemplo, Vermont posee el mayor porcentaje de árboles de maple en el país y tres cuartas partes de su territorio son bosque. Luego está el hecho de la gran industria que se ha formado en torno al fenómeno: hay rutas, tours especializados y festivales, en cada uno de los estados. Se relaciona con otros eventos importantes, como la temporada de calabazas en la región y el Halloween.
En Maine, Vermont y New Hampshire, la mejor temporada va de mediados de septiembre a la mitad de octubre. Se extiende a noviembre en Connecticut, Massachusetts y Rhode Island.
En Boston, Massachusetts, se organizan recorridos en bici a través de las áreas verdes de la ciudad. Aproximadamente a dos horas y media, comienza la ruta carretera Mohawk Trail; es un camino de 101 kilómetros llenos de color. www.massvacation.com
En Vermont se organizan más de 15 festivales que celebran la temporada. Son eventos comunitarios con música en vivo, muestras gastronómicas y artesanales o incluso concursos de espantapájaros. www.vermontvacation.com Islandia No es un país conocido por sus bosques, pero sí por las cascadas. Y es una de ellas el escenario otoñal más destacado: Hraunfossar. Es un conjunto de pequeños saltos de agua cuya fuente es subterránea, que corren a través de lava; la imagen se vuelve más atractiva cuando la vegetación que rodea las cascadas se pinta por completo de rojo y naranja. Se encuentran a una hora y media desde Reykjavik. Hay empresas que las incluyen en sus itinerarios, como Discover
(www.discover.is), pero se puede llegar por carretera desviándose un poco del Road 1, la ruta que da vuelta al país entero.
La curiosa vegetación, que luce como arbustos, se halla en otras regiones, como el Parque Nacional Vatnajökull; en la misma temporada se puede hacer avistamiento de renos. Japón En Japón el otoño es especial porque los cambios comienzan a notarse desde septiembre, al norte del país, y se extienden hacia el sur para terminar en diciembre. Por tal razón, la posibilidad de ver el espectáculo es muy grande.
Uno de los primeros lugares donde las hojas se encienden es el Parque Nacional Daisetsuzan, el más grande del país. Comienza cubriéndose la zona montañosa, con intensos tonos rojos y amarillos. En una de los asentamientos del parque hay aguas termales rodeadas por follaje de colores. hokkaido.env.go.jp
En Tokio hay un jardín creado en el siglo XVIII y llamado Rikugien, el cual contiene paisajes propios de otras áreas de Japón; por ejemplo, tiene su propio bosque de maple. Muchos de estos ecosistemas muestran los efectos del otoño. Entre finales de noviembre y principios de diciembre, el parque se ilumina por las noches y sus casas de té sirven dulces de temporada. www.jnto.go.jp/eng
Otro de los destinos imperdibles es Kioto. El escenario es único porque el fenómeno natural ocurre cerca de imponentes templos, entre ellos Kiyomizu. kyoto.travel Escocia Aunque abundan los bosques con tonalidades otoñales, hay un evento que hace destacar al pueblito de Pitlochry, a hora y media de Edimburgo: Enchanted Forest. Es una exhibición de luz y sonido en medio del bosque, durante octubre. Se acondicionan varios caminos iluminados, y los shows a menudo emulan los colores de la temporada. Cada año se presenta un tema distinto y contempla actividades para niños. En 2016 recibió a 70 mil visitantes, aproximadamente.
El maple, el roble rojo y el sasafrás son especies de árboles que se tornan carmesí. El álamo, abedul, olmo y gingko se vuelven amarillos. Y el zumaque se pone púrpura