Danza de los Concheros, nuevo Patrimonio
El Ayuntamiento de Querétaro declaró la Danza de los Concheros Patrimonio Histórico Cultural Inmaterial. La danza es un ritual de 500 años de antigüedad que recuerda la batalla del cerro de Sangremal, (territorio queretano), en 1531, entre chichimecas y conquistadores. La leyenda dice que esta batalla concluyó gracias a la aparición del apóstol Santiago. En este lugar aún se conserva la cruz de piedra donde el santo se manifestó. El ritual logró sobrevivir a pesar de las dificultades religiosas durante la época colonial, pues los sonidos que emitían las percusiones eran considerados paganos. La razón de ser de esta danza era la de unificar al hombre con el cosmos y entablar una armonía; de ahí que se inicie con el saludo a los cuatro puntos cardinales o los cuatro elementos: fuego, viento, tierra y agua. Los concheros se colocan semillas de árbol (ayoyote) alrededor de los tobillos para que, al moverse, suenen imitando la lluvia. Los tambores marcan el ritmo de los pies y la guitarra, tipo mandolina (instrumento de influencia española), es la que lleva la melodía. El nombre de “conchero” viene precisamente de la base de la guitarra: el caparazón de armadillo, animal que, según las creencias, es de sabiduría ancestral. El nombramiento se realizó a los pies de la estatua del “Danzante Conchero”, en el andador 5 de Mayo, en el centro histórico de la ciudad. Del 12 al 15 de septiembre, los concheros celebraron con danzas y ofrendas monumentales, las Fiestas de la Santa Cruz que derivan de la Fundación de Querétaro y de la aparición de Santiago Apóstol.