Mario Maldonado
La decisión de Núcleo Radio Mil y sus costos
El miércoles pasado, el empresario Edilberto Huesca, presidente del Núcleo Radio Mil (NRM), dijo que la decisión de cancelar la mesa política del programa del periodista Leonardo Curzio —lo cual también provocó su salida de la estación— fue un asunto de negocios. “No era rentable”, le aseguró al aire a la periodista Adriana Pérez Cañedo.
Es cierto que la publicidad en la industria radiofónica está estancada hace más de cinco años, aunque sigue siendo un negocio de 7 mil millones de pesos al año que imanta a muchos empresarios, no sólo por el dinero en juego, sino por el poder que otorga tener una concesión. Esto quedó demostrado en las recientes licitaciones de radio FM y AM que llevó a cabo el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
Sin embargo, la versión del Güero Huesca, como lo conocen en el sector, es ante los ojos de la opinión pública y de dos de los afectados directos, inverosímil. Sobre todo después de que la mesa en la que participaban los analistas Ricardo Raphael y María Amparo Casar, bautizada con el nombre de “Tertulia Política”, tocó temas sensibles que involucraron al presidente del PRI, Enrique Ochoa, y al gobierno federal.
La versión más verosímil es que tras la “tertulia” del jueves, el presidente del PRI, como suele hacerlo con buena parte de los comunicadores, llamó a Ricardo Raphael para solicitarle una réplica. Más tarde habrían llegado las otras llamadas, las de Eduardo Sánchez, el vocero de la Presidencia de la República, al dueño del grupo, Edilberto Huesca, para “pedir las cabezas” de los colaboradores.
En su entrevista-mensaje con Adriana Pérez Cañedo, Huesca reconoció que su grupo —el cual concentra menos de 10% de la publicidad del sector, pese a ser uno de los siete más relevantes del país—, ha estado reestructurándose debido a la disminución de los ingresos publicitarios, por lo que han tenido que recortar personal administrativo, de programación, mercadotecnia y de lo noticiarios, como el que encabezaba Leonardo Curzio.
NRM Comunicaciones, empero, enfrenta más que un problema de liquidez: la familia controladora está ligada al escándalo de Tecnoradio, empresa investigada por la Procuraduría General de la República (PGR) por intentar beneficiarse ilegalmente de las recientes licitaciones de radio. El grupo encabezado por Alí Eduardo Bañuelos, esposo de Viviana Toscano, sobrina de Javier Pérez de Anda, socio de NRM y mandamás de Radiorama, apostó 288 millones de pesos por 37 frecuencias que terminó no pagando tras haber sido sorprendido en la presunta simulación. Lo que sí tuvo que pagar fueron las garantías de seriedad por cerca de 40 millones de pesos.
Los empresarios detrás de Tecnoradio están a esperando el desenlace de las pesquisas que realiza la PGR. De encontrarlos culpables, podrían aplicárseles sanciones económicas y jurídicas para todos los grupos de interés relacionados con la maniobra, es decir, tanto a Radiorama como a NRM. Mauricio Huesca, el director general de NRM, está casado con Lorena Pérez Toscano, hija de Javier Pérez de Anda.
Actualmente las presiones financieras de NRM son tales que conductores de la estación han tenido que gestionar, directamente y con carácter de urgente, publicidad con las dependencias públicas para darle viabilidad a sus espacios informativos.
Lo previsible es que tras la salida de Leonardo Curzio de NRM, quien además de conductor de la primera emisión era el director de Noticias, parte de su audiencia migre a otras cadenas radiofónicas al igual que los anunciantes.
Así que, como estrategia de negocio también se antoja arriesgada la apuesta de dejar fuera a uno de sus conductores estrella por asunto de presupuesto de sus colaboradores.
Posdata. Otro costo que esta polémica decisión podría generarle a los dueños de NRM es que no fructifiquen los acercamientos con la industria para impulsar a Emilio Nassar, radiodifusor de Querétaro cercano a Edilberto Huesca, para convertirse en el nuevo presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT).
Relatos inconscientes. Desde hace unas semanas circula en librerías físicas y digitales el libro Relatos inconscientes (Porrúa), de la escritora mexicana Rebeca Pal (@RebePal). Se trata de su primera obra, aunque su experiencia como escritora pasa también por el periodismo y otros relatos de ficción que esperan ver la luz pronto.
Relatos inconscientes es un libro que puede leerse en unas cuantas horas, pues está compuesto de 31 historias cortas que abordan temas comunes y complejos, como la libertad, el amor, las pasiones, el terrorismo, la vida y la muerte.
“Es una crítica que muestra cómo veo la sociedad que nos rodea”, describe Rebeca. Enhorabuena.