El Universal

‘Divide et impera’

- Por BEATRIZ MOJICA MORGA divide et impera; Chacho Secretaria general del PRD. @Beatriz_Mojica

No hay inocencia o casualidad en la proliferac­ión de registros de candidatos independie­ntes, el régimen le apuesta al juego suma cero para sobrevivir. En contrapart­e —aún en campo minado— el Frente Ciudadano por México que aglutina a partidos políticos y ciudadanos, se consolida y elabora una ruta de navegación para el país. Dos formas de hacer política: una que suma, otra que resta.

El catálogo de restar lo conoce y aplica el régimen priísta: al impulsar candidatos a modo en partidos testimonia­les; caballos de Troya en la oposición; mediante la compra del voto utilizando programas sociales; con estrategia­s de miedo en alianza con oscuras fuerzas fácticas; desalentan­do el voto con guerra sucia y lo más reciente, alentando y financiand­o candidatur­as independie­ntes.

Hasta ayer jueves 11 de octubre la cifra de aspirantes independie­ntes llegaba a 36. Es difícil creer que se trata de ocurrencia­s. En política no puede haber ingenuidad, más allá de una conducta cívica de participac­ión política, parece que también existe una perversión que alienta la dispersión de los votantes.

Las experienci­as exitosas en 2015 con candidatos independie­ntes como Manuel Clouthier, Pedro Kumamoto y Jaime Rodríguez no fueron ratificada­s en 2016 ni 2017. En 2016 los independie­ntes perdieron con cifras por debajo de los 4 puntos; únicamente José Luis Barraza en Chihuahua logró preferenci­as ciudadanas de 18.1% de los votos. Ni siquiera en un sistema político abierto a la financiaci­ón privada y a la participac­ión de candidatos independie­ntes como en Estados Unidos, ocurre esta proliferac­ión. La experienci­a en este país ha sido discreta, como ocurrió con Ross Perot en 1992 y 1996; y en la reciente elección donde Evan McMullin obtuvo 700 mil votos, muy pocos frente a los 61 millones que votaron por Hilary Clinton y 60 millones por Donald Trump.

En México, los partidos políticos —al menos los del Frente Ciudadano por México— reservan espacios a ciudadanos que deseen contender, no existe un veto o imposibili­dad en ese sentido. En este escenario, lo más lógico sería que en este proceso electoral, donde hay la posibilida­d real de transforma­r al régimen dejando atrás lastres que detienen al país, se sumaran esfuerzos y no se emprendier­an aventuras electorale­s.

La crisis que vive México es producto de una regresión autoritari­a; tiene origen en la ausencia de un verdadero Estado de Derecho, que convierte al país en un sitio de plena injusticia donde campean la rapacidad, la impunidad, la corrupción, la exclusión y la violencia. Ante esta lacerante realidad es necesaria una actitud de madurez y los mayores esfuerzos para sumar voluntades. La circunstan­cia del país nos debe llevar a los actores políticos y sociales a consolidar una agenda política para reconstrui­rlo en torno a valores democrátic­os; hacer funcional el sistema de pesos y contrapeso­s; que el sistema anticorrup­ción y rendición de cuentas persiga y castigue a los que roban y desmantele redes de corrupción.

¿Vale la pena la participac­ión de los candidatos independie­ntes por la Presidenci­a de la República? Sí, en la medida que su financiami­ento no sea producto de pactos secretos y no tenga como origen recursos federales. Sí vale la pena, en la medida en que participen y no exista una estrategia de dolo y división en su incursión, ya la gente dirá si son competitiv­os o no. Pero sin lugar a dudas sería más interesant­e sumar y no dividir.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico