De ‘casa abierta’
Al llegar al espacio gastronómico Casa Biko quedé muy sorprendido al percatarme de que lo que prometía la invitación de mi querida amiga y experta enóloga, Paulina Vélez, en un o degustación de vinos a
se quedaba corto con la realidad, ya que la variedad, cantidad y calidad de caldos que ahí había era fuera de serie.
Sinceramente, pocas son las veces en las que uno puede sentirse literalmente
ya que más de 100 etiquetas de todo el mundo aguardaban para ser catadas y probadas —con el mismo placer lúdico— por los amantes y conocedores del buen vino presentes, como comentó Paco Domenech, socio comercial de Paulina.
Cuando ella me platicó días antes que esta- ba preparando una sorpresita para jamás imaginé que pondría a la mano el portafolio completo de etiquetas que ofrece su boutique de vinos Acento, sumando ciento y tantas botellas listas para disfrutarse.
Con copa de champaña en mano nos recibió la anfitriona para refrescar los paladares antes de iniciar el recorrido e ir catando concienzudamente vinos célebres, procedentes de las principales bodegas alrededor del orbe.
De entrada, saludé a varios conocidos a quienes se les iban los ojos con tanto para escoger, como Vivian Bibliowicz, preparando ya sus maletas para asistir a los en Colombia y a la españolísima María Forcada, encantada con un Albariño.
La sommelier Sandra Fernández nos recomendó dos o tres de Borgoña, que son favoritos también de la artista plástica Betsabée Romero, quien me compartió su reciente y maravillosa experiencia durante la pasada vendimia en esa región, que la dejó invitada a volver una y otra vez más.
Claro, imposible probar todo, pero sí lo suficiente para darte una idea de la gran calidad de los vinos llegados desde los mismísimos Russian River, Sonoma y Napa Valleys californianos, o de Washington y Oregon en Estados Unidos, y desde luego, nuestros mejores ejemplares mexicanos.
Por otra parte, algunas icónicas etiquetas de España, Francia, Italia y Austria estaban presentes allí también para dar testimonio de su grandeza,
Y como en toda buena fiesta, para acompañar hubo un delicioso desfile de directas de la cocina de Mikel Alonso y Gerard Bellver.
Por ahí vi al socialité Pepón Rubio, interesado en los consejos expertos de Paulina, y al regiomontano Alejandro Vares.