Nueva revuelta arbitral, ahora en la cancha
Faltan cuatro jornadas para que finalice la fasa regular del torneo y desafortunadamente, el panorama con los árbitros no es nada alentador. Vemos a muchos de ellos sin compromiso, sobrados, pensando que son de los inamovibles o del cuadro titular y que con solamente levantar la voz, la AMA los va a apoyar y van a seguir pitando, pase lo que pase.
En esto del arbitraje se debe ir semana a semana para mostrar fuerza y capacidad sobre el terreno de juego.
El presidente de la Comisión de Arbitraje debería estar pendiente de lo que se habla en los pasillos de la Federación, porque los árbitros de Ascenso MX no están nada contentos con lo que está pasando, no son promovidos para ir a la Liga MX, cuando muchos ya han probado esas mieles.
Ahora que se dan cuenta de la poca calidad de los arbitrajes que han realizado quienes se suponen deberían sostener al gremio, sienten que pueden competir, pero no les dan la oportunidad.
Los errores que hemos visto en los últimos días, lo que ha pasado con el Querétaro ante el Puebla y el Cruz Azul, además de otros duelos que involucran a equipos que pelean por no descender es realmente preocupante y da mucho qué pensar. Hay dos cosas que debemos entender: los árbitros que tienen esas fallas no deben dirigir esos partidos en los que hay mucho dinero en juego o no tienen calidad moral.
Pareciera que se avecina otra revuelta, ahora dentro del terreno de juego, con el retiro de gafetes internacionales a Jorge Isaac Rojas, Alfredo Peñaloza, Paco Chacón, también nos enteramos que José Luis Camargo tendrá que dejar su gafete, que es algo que debería preocupar mucho más.
En los pasillos de la Comisión hay mucho ruido y ponen en riesgo la dignidad de Arturo Brizio, su capacidad, su experiencia, puede ser mancillada por algunos personajes que quieren hacer más revueltas. No es posible que en lugar de mejorar, veamos partidos con peores arbitrajes cuando se suponía que estarían más felices y tranquilos gracias a que su asociación es de lo más fuerte dentro de la Federación.
El diagnóstico tiene que ver con el tema mental. Hay árbitros que no están al cien por ciento dedicados a su labor. Pareciera que no preparan sus partidos, que no están al pendiente de lo que tienen que hacer y por eso hay gente que habla de robos en los arbitrajes.
Lo que más le duele a un árbitro es quedarse en su casa durante el fin de semana y por ahí deberían ir los castigos, pero no solamente de uno o dos partidos, sino acorde al error que cometieron, así es que ojalá el presidente de la Comisión logre calmar las cosas internas y que ellos se conviertan en verdaderos profesionales, de lo contrario se estará hundiendo más.
Lastima, duele, da pena, pero hoy, la realidad es terrible y si ven esto como una crítica negativa es su problema, mientras no quieran resolver ese problema mental que los tiene en donde están.
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