Relevancia.
La producción de autos podría modificarse según el futuro del TLCAN
La industria automotriz en nuestro país ha sido de las grandes beneficiadas desde la creación del Tratado de Libre Comercio entre Canadá, Estados Unidos y México. Desde que se aprobó, este sector aumentó su participación en el PIB nacional de 1.8 a 3.5%. Además de que las exportaciones de nuestro país se multiplicaron 12 veces, convirtiendo a esta industria en la principal generadora de divisas para México.
Las reglas que han hecho esto posible son las de libre comercio y la de origen. Ambas eliminan los pagos por exportación en las aduanas, es decir los aranceles. Esto, claro, siempre y cuando los productos importados y exportados posean al menos un 62.5% de sus componentes originados en la región.
Grandes empresas como Toyota, Nissan, Ford han mostrado confianza al invertir en nuestro país a partir de esto, colocando sus plantas armadoras de vehículos ligeros y motores en 12 estados de nuestro país. Esto representa al menos 36 mil millones de dólares de inversión en los 23 años que este acuerdo ha regido nuestra relación comercial con los vecinos del norte.
Uno de los cambios pedidos por los estadounidenses en el acuerdo comercial es que la regla de origen aumente hasta el 85% además que el 50% sea de contenido estadounidense. Sin embargo, México y Canadá rechazan que se establezca una regla de origen por país, pues no existe en ningún otro acuerdo comercial.
Una regla de origen tan alta podría ocasionar que los productores prefieran mandar los autos terminados, y no para ensamblarlos, pagando sus respectivos aranceles. Esto se vería reflejado en los precios de los vehículos, afectando directamente a los consumidores.
Aunque la regla de origen actual es considerada “estricta” por Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), menciona que las industrias de los tres países integrantes del tratado han solicitado que se mantenga. Sin embargo, hasta ahora aún existe la posibilidad que el Tratado de Libre Comercio llegue a su final.
Ante esta posibilidad, la industria mexicana tendrá que diversificar sus mercados. Asia podría ser una opción, según José Gómez, director de grupo Gocar, porque es una parte del mundo donde existe una alta demanda de vehículos, y este mercado actualmente no puede atender debido a que la mayor parte de la producción del país termina en Estados Unidos.