ZEE como bálsamo
Como usted sabe, estás apuntan a Puerto Chiapas, Puerto Lázaro Cárdenas, Michoacán y uno de los polos del Istmo de Tehuantepec, concretamente la zona de Coatzacoalcos.
La intención es privilegiar la mano de obra de la región, para lo cual se han celebrado convenios con las universidades locales y se ha decretado la posibilidad de deducir 25% del costo patronal en materia de capacitación.
La experiencia, durante los gobiernos de Adolfo López Mateos y Gustavo Díaz Ordaz, apunta a la creación de Ciudad Sahagún en la zona pulquera de Hidalgo. Casas, centros comerciales, auditorio, lugares de recreación para trabajadores entonces sin más opción que raspar magueyes.
Ahí se instaló en su momento la Constructora Nacional de Carros de Ferrocarril que le dejaría espacio años después a la canadiense Bombardier, además de Diesel Nacional, fabricante Dina, luego Dina-Renault.
Las firmas que se instalen en la zona tendrán, entre otros “estímulos” el no cubrir el Impuesto Sobre la Renta durante 10 años, además de devolución del Impuesto al Valor Agregado en el mismo lapso en compra de insumos fuera de la zona.
Localmente, el tributo al consumo tendrá tasa cero.
Quienes adquieran terrenos, pese a la alternativa de comodato, o inmuebles, no cubrirán los derechos respectivos.
La baraja habla no solo de empresas maquiladoras para dar valor agregado a mercancías de exportación, sino industrias y agroindustrias, además de cultivos intensivos de especies marinas.
Hasta hoy se han creado en el planeta, con énfasis de los países asiáticos, 4 mil 268 Zonas Económicas Especiales, desde las cuales se envía 41% de las exportaciones globales. La inversión equivale a la quinta parte de la mundial.
Las plantas aportan 68 millones de empleos.
Colocada la administración del proyecto en manos privadas, concretamente el expresidente del Consejo Coordinador Empresarial, Gerardo Gutiérrez Candiani, el armado obligó a firmar convenios con la Secretaría de Hacienda, los gobiernos estatales y municipales, además de
Planteadas como polos de desarrollo en regiones rezagadas del país, las Zonas Económicas Especiales están siendo calificadas como bendición del cielo frente a los estragos provocados por los temblores de septiembre en la región sur-sureste del país. De hecho, la Cámara de Diputados plantea incrementar el presupuesto
coordinación con bancos de desarrollo para garantizar créditos blandos.
Hasta hoy se tienen en firme 53 proyectos, de los cuales 17 apuntan a energía, además de algunos de factura estatal o municipal, por más que 63% serán producto de inversión privada.
Sin embargo, hay una larga lista de 200 empresas que estudian las posibilidades de la zonas en ruta para exportaciones hacia los países del extremo oriente y desde la zona de Coatzacoalcos y Chiapas a naciones centroamericanas.
La ecuación habla de proyectos acereros, textileros, metal-mecánicos, químicos, petroquímicos y plásticos, además, naturalmente, de agropecuarios.
La prioridad habla de privilegiar la inversión local, lo que en el papel haría más fácil el traslado de trabajadores de la zona sur-sureste hacia las nuevas plantas.
En el volado se habla ya de construir unidades habitacionales que ocuparían en primer lugar los damnificados de los temblores. La gran coyuntura.
Balance general. Como en el caso de los papeles de Panamá, a la aparición de nuevas listas de mexicanos con inversiones en paraísos fiscales, denominadas ahora Papeles en el Paraíso, el Servicio de Administración Tributaria se apresuró a declarar que pondrá en la mira a los señalados.
El problema es que el resultado de su primera pesquisa no fue del conocimiento publico. Si acaso algunas cifras de tributos aplicados, pero sin dar nombres.
El problema no es que se creen empresas en este tipo de lugares, sino que éstas sirvan para ocultar el rastro de capitales no declarados fiscalmente.
La Secretaría de Hacienda firmó hace un año un convenio con 56 países que le permite acceder a depósitos en bancos, inversiones bursátiles y desde luego formación de empresas con capitales mexicanos.
La posibilidad multiplicó el número de inversionistas que se acogieron a la campaña realizada hace unos meses para facilitar el retorno.
Dos yacimientos. Aunque en principio se llegó a sostener que el yacimiento de petróleo ubicado en la zona de Veracruz era el mismo que habían descubierto las empresas Talos Energy y Sierra Oil, en realidad se trata de uno distinto, aunque similar en riqueza. El anunciado por el presidente Enrique Peña Nieto se ubica en Coatzacoalcos, en tanto el otro está en Tabasco. El potencial de uno y otro equivale individualmente a 1.6% de las reservas probadas del país.
El nuevo, conocido como Ixachi, tiene doble vía: la posibilidad de petróleo ligero y gas. La gran pregunta es si le dejarán su explotación a Petróleos Mexicanos o la concesionarán a privados.
Joyas y tangas. Exhibidas en las redes sociales facturas con cargo a la Concanaco que apuntan a estancias en hoteles de medio pelo; compra de alhajas y hasta lencería, incluidos bikinis y tangas, la justificación de la cúpula mercantil habla de que se trata de gastos realizados por sus ejecutivos de alto nivel a quienes se les entregan bonos por un máximo de 40 mil pesos.
La obligación de éstos es facturar las compras realizados al organismo, para utilizarlas en efectos de deducción.
El escenario apunta a la compra de prendas íntimas femeninas.
En los otros casos, se aduce que se trató de la estancia de un chofer en un motel cercano a Puebla, tras haber conducido a ésta al presidente Enrique Solana Sentíes.
En la de las alhajas se justificó el gasto como compra de regalos a los empleados por su onomástico. Así, nada más.
Maíz transgénico. Viva aún la prohibición judicial para siembra experimental de maíz transgénico apoyada con permisos otorgados por la Secretaría de Agricultura, hete aquí que 90% del grano utilizado para tortilla, aún las elaboradas artesanalmente, es genéticamente modificado.
El argumento del juez de la causa habla de no existir certeza de inocuidad dada la cantidad de insecticidas y herbicidas que se utilizan en las siembras cuyo efecto, sostienen científicos, es cancerígeno.
Sin embargo, en lo que parece el ni tú-ni yo han surgido teorías de expertos en biotecnología y genética de alimentos, entre ellos Ariel Álvarez, presidente de la International Society for Biosafety Research, quien afirma que los productos transgénicos pueden cosecharse sin necesidad de tantos agentes químicos.
Una voz más en alimento del debate.