El clásico regio marcará pauta
La última jornada de la Liga MX nos trae uno de los partidos más atractivos del año: Rayados recibe a Tigres, en un clásico que paraliza a Monterrey.
Al considerarlo partido de alto riesgo, el equipo local lanzó el aviso de impedir el acceso a cualquier aficionado que porte prendas o accesorios alusivos al visitante. Además de permitirle solamente la entrada a la persona cuyo nombre y fotografía aparezcan en el abono (boleto anual vendido al inicio de la temporada).
El estadio BBVA Bancomer no tiene zona asignada para la porra visitante. En los recientes derbis regiomontanos, al mezclarse Tigres y Rayados, la violencia ha sido una constante entre los asistentes. Tratando de evitar que se repita esto, Monterrey sentará precedentes en la Liga MX. Para muchos, una norma discriminatoria, para otros, aplaudida, buscando el civismo entre los aficionados en el inmueble.
No recuerdo partido alguno del futbol mexicano en el que se haya impedido la entrada a la porra visitante. Lo que sí recuerdo es que después de distintas peleas entre porras, que terminaban en asesinatos, impedir el acceso a la visitante se volvió una práctica muy común en el futbol argentino.
Mientras tanto, Querétaro espera de nuevo a Ronaldinho. La ciudad se prepara para ver de nuevo de cerca a la que fue su gran estrella, pero ahora en otra faceta. Jugará un “Partido por la Paz” el sábado, a las 7 de la noche.
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