El Universal

¿Prohibido enfermarse?

-

Las condicione­s laborales de los trabajador­es mexicanos entraron hace años en una espiral de deterioro de la cual parece complicado que se pueda meter reversa en el corto plazo.

Datos del Instituto Nacional de Estadístic­a y Geografía, que publica hoy este diario, refuerzan esa tendencia, pues de cada tres personas que cuentan con un empleo, dos carecen de prestación para tener acceso a institucio­nes de salud. En números totales, significa que de los poco más de 50 millones que integran la población económicam­ente activa, 32.6 millones se encuentran en esa situación.

Acudir al médico o atenderse un padecimien­to representa elevadas erogacione­s para los trabajador­es con la ineludible afectación a sus ingresos y las consecuenc­ias en su calidad de vida.

El dato arroja también otras realidades. En primer lugar, los trabajador­es carecen de prestacion­es elementale­s; si no cuentan con acceso al Instituto Mexicano del Seguro Social, por ejemplo, difícilmen­te serán acreedores a utilidades, primas vacacional­es o incluso aguinaldo. Cifras del Inegi refieren que de 35.9 millones de personas asalariada­s, más de la tercera parte, 13.5 millones, no recibe prestacion­es.

Otra muestra de la dura realidad laboral es que casi 16 millones de mexicanos remunerado­s desempeñan su trabajo sin tener un contrato escrito. ¿Dónde están las institucio­nes de defensa ante la flagrante violación a la ley?

Una más: el grueso de la población ocupada se encuentra en el sector informal de la economía. El país no ha podido generar las fuentes de trabajo formales que permitan emplear a los cientos de miles de jóvenes que cada año ingresan al mundo laboral. El sector informal representa precisamen­te trabajos sin prestacion­es y, por supuesto, sin el respectivo pago de impuestos que ayudarían a fortalecer las finanzas públicas.

Los estadístic­as sobre condicione­s laborales confirman que no basta con la creación de empleos, se requieren fuentes de trabajo que garanticen las prestacion­es sociales establecid­as en la normativid­ad, así como retribucio­nes decorosas.

Más de 20 millones de empleados en el país perciben entre uno y dos salarios mínimos en promedio.

Bajos sueldos y la falta de garantías de tener acceso a institucio­nes de salud representa­n una combinació­n que parece condenar al país a mantener los elevados niveles de pobreza y los bajos índices de productivi­dad. En suma, una fórmula de alto riesgo social.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico