Cosas para evaluar en el calzado
Descubrir la ciudad de Medellín, Colombia, a pie; recorrer en varios días el camino de Santiago, en España, o alcanzar la cima de la Table Mountain, en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, son objetivos de muchos trotamundos.
¿Has pensado que el soporte de tus pies es básico para que puedas alcanzar estos sueños? Dependiendo de tu interés viajero, será el tipo de calzado que necesites. He aquí algunas opciones para recorrer distintos tipos de rutas.
Tenis para
Diseñados para correr en montaña, por lo que son extremadamente ligeros y flexibles. Muy de moda porque tienen colores fluorescentes llamativos; sin embargo, no son duraderos para uso intensivo.
Tenis para escalada en roca
Muy cómodos ya que cuentan con una suela adherente y una punta de goma pronunciada para mejorar el agarre en la roca. Aunque son muy cómodos en roca o asfalto no son los mejores para terrenos húmedos y fangosos.
Tenis para
Tenis-bota deportivos con buenas suelas (puedes caminar por casi cualquier terreno), con sistemas de amortiguación para más comodidad y evitar lesiones. Son estables, ajustables y pueden estar elaborados Trail Running,
con fibras y otros materiales impermeables y transpirables.
Botas para
El clásico montañero por excelencia. Protegen el tobillo de torceduras y mejoran levemente la sensibilidad en terrenos complicados. La desventaja es que son muy grandes y pesados, por lo que no vas a “viajar ligero”.
1. Materiales y estructura. Las botas mezclan varios materiales para conseguir un buen equilibrio. Por ejemplo, utilizan malla y nylon sintético para mejorar la ligereza y la transpiración. También se usa el cuero nubuck para la durabilidad y solidez del calzado. Te recomendamos buscar unas botas que combinen estos materiales para generar un buen equilibrio final.
Es importante probar cómo se sienten puestas (con un par de días de uso se aflojarán y adaptarán al pie) y considerar que, para excursiones de un día, podemos elegir calzado flexible, pero para mochilear conviene que sea más rígido y durable.
Otro detalle importante es el sistema de abrochado.
En botas de “alta gama” se están empezando a eliminar las costuras para trabajar con termosellados, que mejoran el aislamiento y la posibilidad de rotura. Es una característica de construcción a tener en cuenta.
2. Entresuela. Es la que contiene el sistema de amortiguación de la bota. Generalmente combina dos materiales básicos: la espuma EVA, que es un polímero extremadamente ligero que soporta bien los golpes y el efecto de las piedras en la planta del pie. Por su parte, el TPU (poliuretano termoplástico) es un plástico muy duradero y más costoso que puede hacer que la bota pierda algo de comodidad, pero garantiza que no se deforme. Así pues, muchos fabricantes trabajan con TPU para la estructura de la bota y con EVA para mejorar la comodidad.
3. Suela. De ésta dependerá la tracción, es decir, el agarre que tengas al suelo. Pero si no vas a realizar actividades en roca y piedra deslizante, con una gama media será más que suficiente (grosor y rigidez medias y goma antideslizante). Existen muchas marcas de suelas en el mercado, pero hace años que Vibram tiene el liderazgo absoluto.
4. Membrana Gore-Tex. Combina gran ligereza, alta impermeabilidad y que protege de los efectos del agua, viento y frío, con eficiente transpiración e impermeabilidad. También facilita la evacuación de la humedad corporal resultante del ejercicio físico. O sea, siempre tendrás tus pies secos.
Esta membrana tiene una duración de seis meses en condiciones rudas, después empieza a perder propiedades.